Un promotor omnipresente

El contratista y promotor Enrique Ortiz es una de las figuras empresariales más relevantes y populares de Alicante. Su nombre aparece a menudo vinculado a temas empresariales, deportivos y judiciales, y casi siempre rodeado de polémica.

El nombre de la empresa Enrique Ortiz e Hijos apareció en el auto del TSJ de Madrid dentro de la investigación del caso Gürtel, entre las firmas que supuestamente habrían financiado ilegalmente al PP valenciano. Según esas diligencias, Ortiz habría aportado al partido unos 100.000 euros.

Pero su nombre aparece vinculado a muchos otros temas. Ortiz es propietario del Hércules Club de Fútbol, equipo recién ascendido a Primera División. El empresario es también el impulsor del polémico Plan Rabassa, que prevé 13.505 viviendas en la periferia de Alicante, y cuya suspensión cautelar fue levantada por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana hace apenas unos días. El promotor también echó un capote a la Generalitat valenciana con motivo de la suspensión de pagos del parque temático Terra Mítica de Benidorm. Ortiz compró por 85 millones la reserva de suelo del parque, que permitió superar esta crisis económica a la empresa.

El ascenso empresarial social de Ortiz se produjo a mediados de los noventa con la llegada a la alcaldía de Alicante de Luis Díaz Alperi, del PP. Ortiz tomó entonces las riendas del Hércules C. F. mientras navegaba junto al ex regidor en su yate. Su relación con Alperi también le deparó un proceso judicial por supuesto favor en la adjudicación de tres aparcamientos subterráneos. El Tribunal Supremo archivó el caso.