"El rechazo de la violencia de ETA es nítido, firme y real"

Sortu, la nueva marca de la ilegalizada Batasuna, consideró ayer que la demanda de la Abogacía del Estado solicitando su no inscripción en el Registro de Partidos está "fundamentada en una decisión política que niega derechos democráticos elementales". En un comunicado enviado tras conocerse que el Tribunal Supremo había admitido a trámite la citada denuncia, los "promotores" de Sortu aseguran que la actuación judicial "viene acompañada" de la detención de cuatro etarras.

En la nota, Sortu recuerda que en sus estatutos figura el "rechazo de todo tipo de violencia, incluida la de ETA", así como "los actos de violencia callejera, los malos tratos y la tortura". "En absoluto es retórico e instrumental el rechazo expresado, sino nítido, firme y real", aseguran.

Sortu quiso salir al paso de quienes les han acusado de permanecer en silencio tras la detención, esta semana, de cuatro etarras y de los actos de kale borroka registrado en Vitoria. En este sentido, denunciaron que se pretende utilizar su silencio como "elemento probatorio para una hipotética ilegalización, presionando al ámbito judicial".

Los arrestos no existen

Esta organización aseguró que su actitud no es "esquiva", sino que decidió "mantenerse al margen" de los acontecimientos políticos "hasta obtener el estatus de legalidad": "No parece de recibo", agregan, "que se le exija a una organización que no existe legalmente como tal".

Unas horas antes, la izquierda abertzale envió otro comunicado para criticar la "actitud entorpecedora" del Estado ante la impugnación de Sortu. En su escrito, sin embargo, no había ninguna referencia a las detenciones ni a los ataques violentos.