Los sindicatos y el Gobierno prevén llegar hoy a un acuerdo para los servicios mínimos del 29-S
Los convocantes aceptan incluir AVE y vuelos internacionales en el pacto, lo que reduce el riesgo de conflictos
La negociación de los servicios mínimos en la huelga general del día 29 se cerrará previsiblemente hoy con un acuerdo entre el Gobierno y los sindicatos. La reunión que durante más de cuatro horas mantuvieron ayer representantes del Ministerio de Fomento y de las centrales convocantes propició una aproximación de posturas que permiten augurar un pacto "en tiempo relativamente corto", según avanzó el secretario general de Transportes, José Luis Cachafeiro, a su término.
Pese a los llamamientos a la prudencia de los representantes sindicales, la huelga tiene enormes posibilidades de diferenciarse de los dos anteriores -en 1994 y 2002- por la existencia de unos servicios mínimos pactados en el transporte y, por tanto, menores visos de conflictividad. Las conversaciones seguirán esta mañana para cerrar un acuerdo hoy.
Clave ha sido que los sindicatos aceptaran incluir el AVE en los servicios mínimos. La propuesta inicial de UGT y Comisiones Obreras no incluía esta posibilidad, pues se basaba en la orden ministerial que reguló la última protesta, en 2002. Fomento rechazó de plano esa oferta con el argumento de que la alta velocidad tiene ahora un peso muy superior al de hace ocho años y que, por tanto, es imprescindible incluirla en los servicios mínimos. Por eso lanzó una contraoferta de un 20% para el AVE y los trayectos de larga distancia más difíciles de cubrir por carretera.
El otro escollo era el sector aéreo. Los sindicatos proponían un solo servicio por trayecto nacional, sin ninguna previsión para los vuelos internacionales. Fomento alegó que estos no podían eliminarse completamente, por lo que ofreció unos mínimos medios del 25%, frente al 33% de la anterior huelga. El Gobierno intentaba compensar así una mayor presencia del transporte ferroviario con una menor del aéreo, especialmente en vuelos nacionales, que quedarían muy por debajo del 25% general de servicios mínimos. "Estamos abiertos a flexibilizar lo que sea posible", aseguraban fuentes sindicales.
Aunque los sindicatos no han visto con malos ojos la propuesta de Fomento, han preferido negociar en lugar de servirle el acuerdo en bandeja al Ejecutivo. También al ministro José Blanco le interesa firmar un acuerdo. El cumplimiento de unos servicios aceptados por los trabajadores reduce el riesgo de conflictos.
