Un tándem sospechoso
Una vez más, y es la novena, la izquierda abertzale ha intentado continuar la actividad de la ilegalizada Batasuna al servicio de la banda terrorista ETA, como dice en su demanda el abogado general del Estado, Joaquín de Fuentes.
Esta vez, el instrumento era una lista surgida de la coalición de dos partidos residuales y la operación consistía en utilizar al anciano dramaturgo Alfonso Sastre, icono del abertzalismo radical, como "banderín de enganche", para dejar su escaño después de las elecciones a Doris Benegas, número dos de la lista.
Alfonso Sastre fue candidato electoral de Herri Batasuna, de Euskal Herritarrok y de ANV, formaciones todas ellas ilegalizadas. La abogada Doris Benegas, hermana del dirigente socialista Txiki Benegas, ha mantenido desde hace 25 años intensas relaciones con el entramado ETA-Batasuna, según las demandas. Desde que en 1984 participó por primera vez en un mitin de Herri Batasuna, ha sido una habitual de los mítines, manifestaciones, homenajes a etarras y actos electorales de partidos luego ilegalizados.
Así, en 1985 participó junto a las primeras figuras abertzales del momento en un homenaje al etarra fallecido Francisco Arriaran Arregi. En 2004 apoyó el manifiesto de Batasuna presentado en el velódromo de Anoeta y avalado en dos comunicados de ETA. Y en julio de 2006, como testigo de la defensa en el macrojuicio a ETA-KAS-EKIN, expuso el "gran reconocimiento social" que, dijo, tenían los procesados.
