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Un tetuaní secuestrado por la policía secreta marroquí pide asilo en España

Fue identificado por error como autor material del 11-M

Mohamed Haddad, un tetuaní de 42 años, identificado por error como uno de los autores materiales del 11-M y secuestrado por la policía marroquí durante 45 días, ha pedido asilo político en España por un supuesto acoso de los servicios secretos marroquíes. El pasado sábado Haddad, casado y padre de dos hijos, cruzó la frontera marroquí con Ceuta y pidió cita en la comisaría de policía de esta ciudad para tramitar su petición de asilo, según aseguró él mismo a este periódico. Ayer lunes el tetuaní tramitó la petición de asilo y fue trasladado al centro de acogida de refugiados donde permanece a la espera de que se resuelva su expediente. "Se cometió un error conmigo y desde entonces vivo en un infierno. He intentado presentarme a las elecciones en Marruecos por el Partido de los Trabajadores y agentes de la DST me dijeron que no me presentara, que una persona investigada por terrorismo no podía presentarse. Sigo padeciendo las consecuencias de aquel error y ya no puedo seguir viviendo en mi país. Quiero integrarme en la sociedad y rehabilitarme pero no me dejan. No quiero ser un juguete de los medios de comunicación que me acusaron sin pruebas y de los servicios secretos marroquíes que todavía siguen hostigándome. Quiero vivir en libertad y no me dejan", asegura.

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El 17 de marzo de 2004, seis días después de los atentados de Madrid, agentes de la DST, la policía política de Marruecos, detuvieron a Haddad y lo trasladaron encapuchado a la prisión de Temara donde, según su relato, fue torturado durante 45 días. "La luz estaba encendida las 24 horas. Perdí 21 kilos. Me llevaron al médico con los ojos tapados.... Se me paralizaba la mano izquierda y tenía pinchazos en el corazón. Me orinaba sin querer en la celda", relató meses después a EL PAÍS. Uno de sus interrogadores hablaba un perfecto español. Ninguna autoridad judicial española o marroquí había ordenado su detención. Su familia y asociaciones de derechos humanos denunciaron su desaparición sin que la autoridad marroquí reconociera que estaba en poder de sus servicios secretos.

Tras su liberación Haddad se presentó voluntariamente en la Policía Judicial de Casablanca donde le extrajeron saliva e hicieron una prueba de ADN. El 18 de octubre de 2005 el juez Del Olmo recibió el informe de la policía científica marroquí y comprobó que las muestras de Haddad no coinciden con las de los terroristas. La policía judicial marroquí tardó seis meses en localizarle, lo que utilizaron periódicos como El Mundo y dirigentes del PP como Vicente Martínez Pujalde para acusarle de "colaborar con los servicios secretos marroquíes" y arrojar sobre él graves imputaciones, entre ellas que "un posible autor material del 11-M está bajo protección de Marruecos". El juez del Olmo y la fiscal Olga Sánchez le interrogaron en Rabat en el curso de una comisión rogatoria que tuvo lugar meses antes de cerrar la instrucción del caso.

Haddad perdió la residencia española al trasladarse a Marruecos meses antes del 11-M. Entre sus amigos en la mezquita El Huda, en el barrio madrileño de Lavapiés, estaba Jamal Zougam, condenado como autor material del atentado. Desde entonces no ha regresado a España. Su esposa y dos hijos viven en Madrid, ciudad en la que residió y trabajó durante años.

Mohamed Haddad, el pasado día 1 de mayo, en un centro de curtidores de piel en Tetuán (Marruecos).
Mohamed Haddad, el pasado día 1 de mayo, en un centro de curtidores de piel en Tetuán (Marruecos).FIDEL RASO

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