El tripartito no se pone de acuerdo sobre quién debe dar explicaciones

Seis días de apagón a medio año para las elecciones no es la mejor carta de presentación de los partidos que integran el Gobierno catalán, por más que la responsabilidad del suministro sea, en primer lugar, de las compañías eléctricas. El tripartito se afanó ayer en entonar un cierto mea culpa, admitiendo sólo errores de comunicación. Ninguno de los socios del Gobierno de José Montilla quiere cargar con la culpa y ayer el tripartito fue incapaz de decidir qué consejero o consejeros deben explicarse en el Parlamento.

Durante la semana de la nevada ha sido el titular de Interior, Joan Saura (ICV), quien ha acaparado la mayor parte de las críticas de la oposición. Ahora ésta pide explicaciones a otros consejeros: el titular de Economía y responsable de energía, Antoni Castells (PSC), y el consejero de Innovación y Turismo, Josep Huguet (ERC), entre otros.

El secretario general de Esquerra Republicana, Joan Ridao, anunció por la mañana que iba a comparecer un consejero de cada partido, con lo que el tripartito asumía las responsabilidades a partes iguales. Pero el departamento de Innovación no tardó en asegurar que, por ahora, Huguet no piensa acudir al Parlamento catalán. El departamento de Economía tampoco confirmó ayer si Castells piensa comparecer, y fuentes de Interior se limitaron a decir que Saura acudirá al Parlamento cuando sea necesario. Será el presidente Montilla quien acabe decidiéndolo.

La situación contrasta con lo vivido en julio de 2007, cuando otro apagón dejó media Barcelona sin suministro. Entonces las elecciones estaban mucho más lejos en el calendario y no hubo problemas para que dos consejeros, Castells y Saura, se ofrecieran a comparecer en el Parlamento apenas 24 horas después del apagón.