317 coches quemados en una sola noche en Francia
Es una salvaje costumbre que se remonta a algunos años. La víspera de 14 de Julio, fiesta nacional de Francia, algunos jóvenes de los barrios más pobres de las grandes ciudades salen por la noche con intención de quemar coches y enfrentarse a la policía. Este año, que algunos especialistas presagian como el de un verano caliente, se ha saldado con 317 coches carbonizados y 240 detenidos, más que el año pasado.
La mayoría de los casos se han contabilizado en la problemática, dura y en buena parte marginal provincia de Seine-Saint Denis, a las afueras de París, donde arrancó la revuelta que en 2005 inflamó todos los barrios de Francia.
La semana pasada, grupos de jóvenes de Firminy (Loira), una localidad de 18.000 habitantes, quemaron más de 50 coches y un centro comercial en una ciega protesta por considerar que la policía les miente al asegurar que un amigo suyo se ha suicidado en la comisaría, cosa que no creen.