Al menos 38 muertos tras un atentado suicida en una oficina electoral de Pakistán
Un vehículo estalla frente a la sede del partido opositor de Benazir Bhutto en la región tribal de Kurram, al oeste del país.- Es el último día de campaña antes de las elecciones del lunes
Al menos 38 personas han muerto y decenas han resultado heridas en un atentado suicida frente a una sede electoral del opositor Partido Popular de Pakistán (PPP), formación de la asesinada ex primera ministra, Benazir Bhutto.
El atentado se perpetró ayer en el cinturón tribal fronterizo con Afganistán, en la localidad de Parachinar, en la región de Kurram. Los primeros informes de la policía apuntan a que la bomba estaba adosada al vehículo y el objetivo era Riyaz Hussain Shah, candidato independiente respaldado por el PPP. Shah, sin embargo, logró salir ileso. Miembros de la formación política estaban preparando las inminentes elecciones del próximo día 18 de febrero y se dirigían a la oficina electoral. Se trata del primer atentado contra el PPP desde la muerte de Bhutto. La formación es uno de los dos principales partidos opositores paquistaníes junto con la Liga Musulmana-N (PML-N), liderada por Nawaz Sharif.
Elecciones
Ayer fue el último día de campaña en Pakistán antes de los comicios del lunes. Hoy es jornada de reflexión. El Gobierno ha movilizado a más de 80.000 soldados para el día de las elecciones ante el miedo a posibles atentados.
Encuestas difundidas por organismos extranjeros dan al PPP como claro ganador de los comicios, seguido de la Liga de Sharif. Ambos partidos han amenazado con protestas si se produce, como dicen temer, un fraude electoral que dé la victoria a la Liga Musulmana-Q (PML-Q) que apoya al presidente Pervez Musharraf.
El presidente paquistaní defendió el martes la creación de un Gobierno estable y democráticamente electo a través de unas elecciones "transparentes" que "no pueden ser de otro modo" para luchar contra el extremismo.
"Tengo la certeza total de que estas elecciones serán libres, justas, transparentes y pacíficas. No pueden ser de otro modo", ha declarado el mandatario de Pakistán.
Musharraf ha expresado su esperanza de que, "si Dios quiere, tendremos un Gobierno estable, elegido democráticamente, y aseguraremos el éxito de nuestra lucha contra el extremismo y el terrorismo, así como el crecimiento económico de Pakistán".
