La Comunidad Andina resucita
La CAN aspira a nuevas metas en la cumbre que hoy celebra en Bolivia, una vez superada la crisis tras el abandono de Venezuela
La reunión de los Jefes de Estado de la Comunidad Andina de Naciones (CAN), que hoy se celebra en el valle de Tarija, en el sur de Bolivia, espera lograr el fortalecimiento de este bloque regional con la participación de Chile ?ausente durante 30 años?, además de consolidar los lazos con la Unión Europea.
Los presidentes de Perú, Alan García, y de Ecuador, Rafael Correa, se encuentran en Tarija junto con el anfitrión, el boliviano Evo Morales. Hoy se espera la llegada de los mandatarios colombiano, Álvaro Uribe, y chilena, Michelle Bachelet, que asistirán al acto principal de la 17ª cumbre presidencial de la CAN.
El acuerdo subregional andino, que ha emulado la estructura de integración de la Unión Europea, ha languidecido a lo largo de sus casi 40 años de vida debido a la falta de voluntad política de sus miembros para alcanzar las metas de una integración comercial, económica y política.
Chile decidió hace tres décadas retirarse de lo que entonces se conocía como el Pacto Andino debido a las discrepancias en las políticas proteccionistas de inversiones extranjeras. Y hace poco más de un año, Venezuela abandonó la CAN en una decisión que hizo saltar las alarmas por el riesgo de desaparición del acuerdo de Cartagena.
Durante la presidencia temporal de Bolivia, este país no sólo ha logrado evitar la desaparición de la CAN, sino que, con la incorporación de Chile, el acuerdo tiene opciones de revivir y fijarse nuevas metas para actuar como uno de los bloques de integración subregional.
"Estamos seguros de que la CAN saldrá fortalecida de este encuentro de mandatarios en Tarija, se ha trabajado en ese sentido pese a situaciones críticas. Hemos logrado grandes avances y para Colombia tiene doble significación esta cumbre, toda vez que recibiremos la presidencia pro tempore y para ello tenemos ya objetivos trazados", explicaba en vísperas del encuentro el vicecanciller boliviano, Camilo Reyes, que, junto a sus colegas andinos, negoció la Declaración de Tarija, que se suscribirá al término de la reunión.
Las negociaciones sobre el texto de la declaración han sido duras. Los delegados no han logrado consenso en tres de los 13 puntos que podrán incluirse en el documento final y se refieren a asuntos como el agua, la migración laboral y los biocombustibles.
Las negociaciones para alcanzar un acuerdo con la Unión Europea es uno de los puntos más importantes de la reunión presidencial. Las mayores objeciones provienen de Bolivia, que había planteado la negociación conjunta en asuntos como la propiedad intelectual, las inversiones, los servicios y las compras estatales. La CAN aprobó recientemente la Decisión 667, por la que los cuatro países miembros se comprometen a mantener el respeto a las asimetrías de desarrollo entre los cuatro países y la Unión Europea, que les permitirá negociar según su ritmo y capacidad.
El secretario general de la CAN, el ecuatoriano Freddy Ehlers, hizo notar que esta decisión regional permite otorgar "la libertad a los países para que negocien de acuerdo a su realidad" y coincidió con el canciller boliviano, David Choquehuanca, que se trata de un reconocimiento "de la unidad en la diversidad".
