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Corea del Sur y EE UU acuerdan el libre comercio

El pacto es el más importante para Washington desde el TLC de 1994

Yolanda Monge

Los negociadores de Estados Unidos y Corea del Sur alcanzaron en la madrugada de ayer un acuerdo para un Tratado de Libre Comercio (TLC) con la finalidad de aumentar las exportaciones estadounidenses en el país asiático. El acuerdo fue primeramente negociado por el anterior presidente estadounidense, George W. Bush, pero la Administración de Obama ha conseguido algunas concesiones consideradas "importantes" por los negociadores del país americano.

Estas concesiones incluyen una reducción de las tarifas estadounidenses en vehículos surcoreanos importados y una provisión bajo la cual Corea del Sur eximirá hasta 25.000 coches estadounidenses de sus estrictos estándares de seguridad con la condición de que los suyos superen regulaciones similares en EE UU.

"El convenio refuerza el liderazgo de EE UU en el sureste asiático", dice Obama
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Washington ha paralizado de momento su petición de acceso sin restricciones al mercado de carne surcoreano y la prohibición del país asiático de importar carne estadounidense. Las limitaciones son claves para la industria estadounidense, que lucha por recuperar un mercado perdido en los últimos años ante los productores australianos.

"El pasado mes conduje las negociaciones en Seúl para lograr el mejor acuerdo para los trabajadores norteamericanos y nuestras compañías, y este acuerdo que ahora se ha firmado está a la altura de las expectativas", dijo ayer Obama. "Estamos fortaleciendo nuestra habilidad para crear y defender las manufacturas en EE UU, incrementando las exportaciones de productos agrícolas y ampliando el mercado de servicios surcoreano para las compañías estadounidenses".

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Los cambios, junto con la eliminación de la rigidez de los aranceles de Seúl sobre los productos agrícolas estadounidenses y la perspectiva de una mayor apertura del mercado financiero estadounidense de ingeniería y otras empresas de servicio, fueron suficientes para que Obama decidiese tratar de ganar la aprobación del Congreso sobre el acuerdo el próximo año. Con el acuerdo "se profundiza la fuerte alianza entre Estados Unidos y la República de Corea y se refuerza el liderazgo estadounidense en el sureste asiático", añadió el presidente.

El pacto es la primera gran incursión de la actual Administración en las políticas de mercado, y fuentes oficiales han señalado que podría ir seguida de esfuerzos para que el Congreso apruebe acuerdos pendientes con Panamá y Colombia. Corea del Sur es el séptimo socio mercantil de mayor importancia y un TLC entre ambos supone el mayor tratado comercial desde el Tratado de Libre Comercio de América del Norte de 1994.

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Sobre la firma

Yolanda Monge
Desde 1998, ha contado para EL PAÍS, desde la redacción de Internacional en Madrid o sobre el terreno como enviada especial, algunos de los acontecimientos que fueron primera plana en el mundo, ya fuera la guerra de los Balcanes o la invasión norteamericana de Irak, entre otros. En la actualidad, es corresponsal en Washington.

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