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Decenas de sirios huyen a Turquía ante el avance del Ejército en el noroeste

Erdogan asegura que "no cerrará las puertas" a los refugiados. Francia y Reino Unido preparan una resolución de condena al régimen sirio en el Consejo de Seguridad de la ONU

La represión del régimen de Bachar el Asad está llevando a decenas de personas a huir hacia Turquía. Al menos 122 sirios, incluyendo mujeres y niños, han cruzado la frontera hacia Turquía la pasada noche en Jisr al-Shughur, una remota ciudad agraria de 50.000 habitantes al noroeste del país, según ha informado la agencia estatal turca de noticias, Anatolia. El pasado fin de semana fueron 44 sirios los que abandonaron esta localidad y se adentraron en Turquía. Uno de ellos murió en la travesía. El Gobierno turco ha cifrado en casi medio millar el número de personas que ya han cruzado la frontera.

Los refugiados se han instalado en tiendas de campaña cerca de la frontera, en la provincia turca de Hatay. Los sirios habían huido de la ciudad de Jisr al-Shughur ante el avance de las tropas y los carros de combate del Ejército sirio. Sus habitantes esperan un violento contraataque de las tropas leales al presidente. Más cuando el Gobierno ha ordenado al Ejército que responda con firmeza a los ataques supuestamente cometidos el pasado lunes en esta ciudad por "bandas armadas", en los que presuntamente murieron más de 120 soldados y policías, tal y como informó Damasco.

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"El Ejército está tomando posiciones alrededor de Jisr al-Shughur", ha declarado a Reuters un activista contactado por teléfono. "Muchas personas han abandonado la ciudad porque están asustadas", ha añadido esta fuente anónima, la cual prevé que va a haber muchos muertos. Los médicos y enfermeros también habrían huido, lo que agravaría la situación en caso de nuevos incidentes violentos. Las huidas llegan en mitad de las primeras deserciones en el Ejército sirio. Algunos soldados se han amotinado para unirse a los manifestantes civiles.

El lunes, el ministro del Interior, Mohamad Ibrahim al Shaar, prometió que el Gobierno de Bachar el Asad respondería con "firmeza" a los ataques armados. "Actuaremos con firmeza y decisión en base a la ley y nunca nos quedaremos callados ante cualquier ataque armado contra la seguridad del país", advirtió.

Disparos desde helicópteros

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La agencia France Presse ha recogido varios testimonios de los heridos que han llegado hasta Turquía. Selim, de 28 años, se despertó el lunes en una cama de hospital en Antioquía, un pequeño pueblo en el sur de Turquía, a unas decenas de kilómetros de Siria. "Lo último que recuerdo es cuando un francotirador me disparó una bala y me entró por la clavícula y salió por mi flanco izquierdo. Cuando traté de advertir a mis amigos, otra bala atravesó mi mano. Después perdí el conocimiento ", dice Selim.

Mohamed, un pintor de 31 años, también resultó herido el domingo en Jisr al-Shughu: "Son agentes de paisano los que me dispararon el domingo. Una bala atravesó mi mano derecha y tengo tres dedos que no puedo mover". Los refugiados aseguran que helicópteros del Ejército sirio disparan a los manifestantes.

Turquía no cerrará puertas

Un portavoz del Ministerio de Exteriores turco ha asegurado que ya son más de 420 personas las que han cruzado la frontera desde que comenzaron las protestas en marzo. La televisión turca ha mostrado imágenes de gente herida que está siendo atendida en hospitales al sureste de Turquía. En rueda de prensa, el primer ministro turco, Tayyip Erdogan, ha afirmado que su país "no va a cerrar las puertas a los refugiados sirios".

Kemal Dagistanli, alcalde de la localidad fronteriza de Yayladagi, ha asegurado que las personas que han cruzado son atendidas por los equipos de la Media Luna Roja. "Ya había unos 250 sirios en el campamento, y siguen llegando grupos", ha dicho Dagistanli. "Nuestro mayor temor es que vaya llegando más gente si no hay una reconciliación en Siria", ha agregado. Unos 35 refugiados sirios están hospitalizados en varias clínicas de Hatay, la provincia turca vecina a Siria, según France Presse. Los vecinos de la aldea fronteriza de Guvecci están enviando pan y mantas a un cercano poblado sirio. El Ejército turco ha aumentado su presencia a lo largo de la frontera con Siria por razones de seguridad.

El Gobierno de Erdogan ha sido un importante aliado de Siria en los últimos años, pero el primer ministro turco ha pedido al régimen de El Asad que sea "más tolerante con la población civil tan pronto como sea posible" y cambie de "actitud". Pero El Asad no hace sino ganarse la enemistad de los principales actores de la comunidad internacional. El ministro de Exteriores británico, William Hague, ha dicho en el Parlamento que el presidente sirio "está perdiendo su legitimidad", y le insta a emprender reformas o echarse a un lado.

David Cameron, primer ministro británico, ha asegurado que Reino Unido y Francia preparan ante el Consejo de Seguridad de la ONU una resolución de condena contra el Gobierno de Siria por su violenta represión de las manifestaciones organizadas por los grupos de oposición. Reino Unido, Francia, Alemania y Portugal han hecho circular desde el pasado mes un borrador de la resolución para condenar al régimen sirio. Pero los diplomáticos británicos están trabajando en una condena más fuerte de la pensada en un primer momento.

Un herido sirio tras cruzar la frontera hacia Turquía.
Un herido sirio tras cruzar la frontera hacia Turquía.AFP (Mustafá Ozer)

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