Detenido el cerebro del asalto a la Embajada española en Guatemala

Pedro García Arredondo, exjefe del tenebroso Comando Seis de la extinta Policía Nacional de Guatemala y uno de los criminales de guerra más sanguinarios del país, fue capturado el domingo por la noche mientras asistía a un acto político en su aldea natal, al este de la capital guatemalteca.

García Arredondo, junto a los ya fallecidos Germán Chupina Barahona y Manuel de Jesús Valiente Téllez, configuró el tridente de la represión más feroz contra los adversarios políticos del dictador Romeo Lucas García, el general que gobernó Guatemala de 1978 a 1982. El cuarto as de este póquer es el exministro del Interior, Donaldo Álvarez Ruiz, prófugo de la justicia internacional.

El Comando Seis era un cuerpo dedicado a ejecutar "operaciones encubiertas" contra la guerrilla urbana, eufemismo detrás del que se esconde el secuestro, tortura y asesinato de todo sospechoso de colaborar con la guerrilla de inspiración marxista.

Entre los crímenes más sonados que se atribuyen a García Arredondo está el brutal asalto a la Embajada de España, el 31 de enero de 1980, hecho por el cual tiene una orden de captura de la Audiencia Nacional española. En el asalto, y el incendio que se declaró después, murieron 39 personas, en su mayoría indígenas contrarios a la dictadura que se habían refugiado en la legación. En el ataque fallecieron tres diplomáticos españoles, entre ellos el primer secretario de la misión diplomática, Jaime Ruiz del Árbol. El embajador, Máximo Cajal, logró salvar la vida.

No obstante, la detención de Arredondo obedece a un solo crimen: el secuestro y asesinato del estudiante Edgar Sáenz, miembro de una organización izquierdista, que fue detenido por agentes del Comando Seis mientras repartía boletines de prensa.