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Erdogan renuncia a ser presidente de Turquía en favor de su 'número dos'

El ministro de Exteriores, Abdulá Gül, se compromete a respetar los principios laicos

Juan Carlos Sanz

Recep Tayyip Erdogan, el gobernante más votado en la reciente historia de Turquía, renunció ayer a ser presidente de su país, a pesar de contar con una abrumadora mayoría en el Parlamento que designará al jefe del Estado en una elección indirecta a partir del viernes. "Mi hermano Abdulá Gül es el candidato a ser el 11º presidente de la República", proclamó ayer tras una reunión del Partido de la Justicia y el Desarrollo (islamista moderado) en Ankara. Gül, ministro de Asuntos Exteriores, se comprometió a "respetar los valores de la República laica", como impone la Constitución turca.

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"Ha sido un sacrificio personal de Erdogan", reconocía poco después el ministro de Sanidad, Recep Akdag. El primer ministro y líder del islamismo político turco ha esperado casi hasta el último momento para renunciar a un cargo que ambicionaba. En su lugar, coloca a su número dos, un político de 56 años con un perfil más prooccidental y un talante más proclive al compromiso, aunque inequívocamente islamista, al igual que su jefe de filas, con quien refundó un partido moderado hace siete años.

La oposición de los altos mandos militares, con el general Yasar Buyukanit a la cabeza, que exigían un presidente laico, y la multitudinaria marcha de rechazo a su candidatura que recorrió hace apenas 10 días la capital turca, han pesado en su renuncia.

Erdogan habría podido ser un presidente controvertido durante siete años, aunque su partido perdiera la mayoría absoluta en las elecciones legislativas del próximo noviembre. Ahora tendrá que volver a encabezar la batalla política, como un amplio sector islamista le ha reclamado para evitar un revés en las urnas, y completar su tarea reformadora de Turquía.

La oposición laica, encabezada por los socialdemócratas del Partido Republicano del Pueblo, recibió con alivio la renuncia de Erdogan, pero exigió que Gül demuestre con hechos su lealtad a los principios laicos de Turquía. El líder socialdemócrata Deniz Baykal le advirtió contra el peligro de "querer conservar su identidad" islamista.

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Despejadas las especulaciones que amenazaban con desencadenar la inestabilidad política, el ministro de Exteriores compareció anoche en Ankara para afirmar: "Seré, sin duda alguna, respetuoso con los principios de la República. Todos verán que la democracia funciona en Turquía". Gül también dijo que el hecho de que su esposa, Hayrünnisa, lleve la cabeza cubierta con el pañuelo islámico, sólo era "una preferencia personal" y un "derecho individual" que también debe ser respetado.

El ministro de Exteriores turco, Abdulá Gül (izquierda), y el primer ministro, Recep Tayyip Erdogan, ayer en Ankara.
El ministro de Exteriores turco, Abdulá Gül (izquierda), y el primer ministro, Recep Tayyip Erdogan, ayer en Ankara.AP

LOS PODERES DEL PRESIDENTE

Es elegido por el Parlamento para un periodo de siete añosDesigna al primer ministro y al jefe del Estado Mayor de las Fuerzas ArmadasRepresenta al Estado y coordina las institucionesPreside el Consejo de Seguridad Nacional y declara la ley marcial y el estado de emergenciaConvoca al Parlamento en caso de urgencia y promulga las leyes

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Sobre la firma

Juan Carlos Sanz
Es el corresponsal para el Magreb. Antes lo fue en Jerusalén durante siete años y, previamente, ejerció como jefe de Internacional. En 20 años como enviado de EL PAÍS ha cubierto conflictos en los Balcanes, Irak y Turquía, entre otros destinos. Es licenciado en Derecho por la Universidad de Zaragoza y máster en Periodismo por la Autónoma de Madrid.

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