El jefe de la logia P-2 preparó un golpe de Estado en Italia con ayuda de los coroneles griegos
Lucio Gelli, maestro venerable de la logia clandestina masónica Propaganda 2 (P-2), preparó un golpe militar en Italia en los años 1968-1969, con apoyo del régimen militar griego, según informes de los servicios secretos griegos conocidos ahora. Gelli actuó en aquella época de contacto entre los fascistas italianos y los coroneles griegos.
Cada día aparecen más claras las intenciones golpistas de Lucio Gelli. Ahora resulta que el señor P, el hombre que en 1968 y 1969 mantuvo en contacto a los fascistas italianos con los coroneles griegos, no era Pino Rauti, como se dijo en el proceso de Catanzaro sobre la matanza de la plaza Fontana, en Milán, que señaló el culmen de la famosa «estrategia de la tensión». El señor P era Lucio Gelli, es decir, el señor Propaganda. Así acaban de afirmarlo los servicios secretos griegos y un grupo de periodistas que indagan en Grecia sobre los presuntos masones afiliados al OMPAM, la organización masona internacional que estaba organizando Gelli, a la que, al parecer, pertenecían varios jefes de Estado de países dictatoriales, especialmente de América Latina.Existe una carta de un emisario de Georges Papadópulos al coronel que presidió el Gobierno militar y un testimonio enviado a los servicios secretos griegos por Mikail Kottaki, que trabajaba en el Departamento de Asuntos Exteriores en aquella época, que confirman esta hipótesis. Ambos documentos fueron enviados a los servicios secretos a la caída de los coroneles.
Se conoce la copia original del emisario del Gobierno. Tiene fecha de 15 de mayo de 1969. En ella se habla de los encuentros mantenidos en Grecia por Lucio Gelli y de sus contactos con los coroneles griegos para preparar un golpe de Estado en Italia. En el documento se dice que los coroneles griegos planteaban algunas dificultades relativas al grupo militar italiano que era necesario movilizar para que la operación tuviera éxito.
Mientras tanto, Giovanni Spadolini, secretario nacional del Partido Republicano, recibió ayer el encargo oficial de formar nuevo Gobierno. El presidente de la República, Sandro Pertini, le confirmó un mandato «amplio y sin vinculaciones». Esto quiere decir que Spadolini puede intentar todas las fórmulas posibles consentidas por la Constitución. Arnaldo Forlani lo ensayó inútilmente durante veinte días.
Ante los periodistas, Spadolini no ocultó las graves dificultades que le esperan: «Una crisis moral y otra económica, en un momento dramático para el país».
El dirigente republicano afirmó que antes de 48 horas, la comisión de los tres sabios, encargados por el Parlamento para dar su veredicto sobre la logia P-2, entregará su veredicto. Fue precisamente este problema el que motivó, en parte, el fracaso del democristiano Forlani en su intento de formar Gobierno. Fue el propio Spadolini, Junto con el secretario del Partido Socialista (PSI), Bettino Craxi, quien puso como condición indispensable para alcanzar una nueva fórmula de gobierno resolver antes el problema provocado por la logia P-2.
