Los conflictos nacionalistas en Sumgait causaron la muerte de 31 personas, reconoce Tass

Los violentos enfrentamientos del 28 de febrero pasado en la ciudad de Sumgait, en la República Soviética de Azerbaiyán, causaron la muerte de 31 personas, según informó anoche la agencia oficial Tass, que proporcionó la primera cifra oficial de víctimas en aquellos incidentes de carácter nacionalista. Otras dos personas, aparentemente de nacionalidad azerbaiyana, habían resultado muertas anteriormente en una localidad cercana a Nagorno-Karabaj (región mayoritariamente armenia adscrita a Azerbaiyán), con lo que se eleva a 33 la cifra total conocida de víctimas en la serie de disturbios étnicos en el Cáucaso.

En Sumgait, donde se decretó un toque de queda el pasado lunes, "elementos criminales cometieron acciones violentas y saqueos y dieron muerte a 31 personas, entre las cuales estaban gentes de distintas nacionalidades, ancianos y mujeres", señaló Tass. Según la agencia, . en las acciones ilegales" participaron "gentes inestables e inmaduras bajo la influencia de rumores falsos sobre los sucesos en Nagorno-Karabaj y Armenia". En estas dos zonas tuvieron lugar la semana pasada masivas manifestaciones causadas por reivindicaciones nacionalistas y ecologistas. Miembros de la comunidad armenia de Nagorno-Karabaj solicitaban que su región fuera incorporada a Armenia.Según Tass, se han tomado .enérgicas medidas" para "normalizar" la situación en Sumgait, un importante centro de la industria química situado junto al mar Caspio, donde residen unas 200.000 personas. "Los culpables de los delitos," han sido arrestados y serán sometidos a los tribunales. Una. comisión especial gubernamental dirigida por Gasan Seidov, presidente del Consejo de Ministros de Azerbaiyan, ha sido creada para hacer frente a la situación

Según Tass, se están resolviendo el funcionamiento estable de los servicios urbanos y el mantenimiento del orden público. Asimismo, se presta ayuda a los heridos y se toman medidas basadas en el estudio de las peticiones de los ciudadanos. La agencia, que no daba detalles sobre la nacionalidad de las víctimas ni de los detenidos afirmaba que los trabajadores de la ciudad mostraban "contención" y la vida laboral y académica continuaba su curso.

Palabras de Gorbachov

El líder soviético Mijail (Gorbachov, que se dirigió hace una semana a las repúblicas de Armenia y Azerbaiyan con un mensaje invitando a la calma, subrayó ayer de nuevo su determinación a no evadir los problemas que su país tiene planteados. En un encuentro con el dirigente comunista austriaco, Franz Muhri, Gorbachov dijo que la vida misma ha forzado al PCUS a reconocer que no puede seguir "evadiendo los problemas reales". "Ignorar la realidad es tal vez la peor forma de oportunismo", dijo el líder soviético en lo que puede interpretarse como una velada referencia a los sucesos del Cáucaso.

"Las dificultades son inevitables. Hemos recibido una herencia de la que no podemos librarnos enseguida, pero no seremos presa del pánico ni de la euforia", continuó Gorbachov, que se mostró convencido de que "tenemos base para esperar el éxito".

En una entrevista difundida anoche por Tass, el nuevo primer secretario del Partido Comunista en Nagorno-Karabaj, Genrij Pogosian, aseguraba que la situación en su región "se está normalizando" y culpaba a su antecesor, cesado ftilminantemente el 24 de febrero pasado, de haber creado "dificultades artificiales" en el intercambio cultural, abastecimiento de literatura y manuales escolares en la lengua materna de la comunidad armenia, que representa un 75% de la población de la zona.

"Dificultades artificiales"

La anterior dirección del partido, dijo Pogosian, había "creado dificultades artificiales" también en "otros aspectos de las relaciones multifacéticas y tradicionales entre los trabajadores de Nagorno-Karabaj y la fraternal Armenia". "Estos problemas se podían y se deberían haber resuelto de forma operativa", señaló Pogasian, quien anunció la realización de un amplio trabajo ideológico y propagandístico.

Las manifestaciones surgieron de una disputa sobre la redefinición de las fronteras entre las repúblicas de Armenia y de Azerbaiyán, de modo que volviese a Armenia la región de Nagorno-Karabaj, que depende actualmente de Azerbaiyán.