_
_
_
_
_
REBELIÓN CALLEJERA EN EL ESTE

Más de 200.000 opositores serbios celebran su Nochevieja con una fiesta protesta

Ramón Lobo

Más de 200.000 personas llenaron ayer la plaza de la República, llamada por la oposición a Slobodan Milosevic la plaza de la Libertad, abarrotando las calles adyacentes. Desde la plaza de la República hasta la plaza de Slavia, cerca de dos kilometros, una muchedumbre arracimada trataba de llegar al lugar donde se celebraba la fiesta de Nochevieja. Según Radio Index, la emisora de los estudiantes, cerca de 500.000personas salieron ayer a la talle. Se trata del mayor éxito de la oposición -Zajedno (Unidos) y los estudiantes-, desde el comienzo de las manifestaciones, hace ya 55 días, contra el fraude electoral que les ha arrebatado la victoria.

ENVIADO ESPECIALA las once de la noche el grupo musical serbio Con las Armas Contra los Secuestradores inició los sones de una de sus canciones más emblemáticas. La gente; ancianos, varones, mujeres, jóvenes y niños, comenzaron a aplaudir enloquecidos.El escenario, imitando a uno pop, con decenas de focos y con un cartel gigantesco que decía "La protesta de los estudiantes 1996-1997", sirvió para una fiesta que muchos recordarán toda su vida como la fiesta de la democracia. Con la música de la película Underground de Emir Kusturica, el famoso tema llamado El claro de la luna cantado por su actor principal Lazar Ristovski, la gente enloqueció con gritos de "¡victoria, victoria!" y "¡Serbia, Serbia!"

Poco antes de las doce de la noche del 13 de enero, cuando en Belgrado se celebra la Nochevieja según el calendario juliano, 80 personas con 80 tambores comenzaron a redoblar violentamente. El último minuto del último día del calendario serbio la gente coreó cada uno de los segundos. A las doce, decenas de bengalas, petardos y cohetes surcaron el cielo.

Los vecinos desde las ventanas próximas bailaban y encendían y apagaban las luces en señal de solidaridad. Poco después, los dos principales líderes de la oposición, Vuk Draskovic y Zoran Djindjic, se dirigieron al pueblo. Draskovic dijo: "Somos prisioneros. Pero este año vamos a salir de la cárcel". "¡Libertad, libertad!", gritaba la muchedumbre. Djindjic exclamó: "¡Es el año de la victoria de Serbia! Es el año de la libertad. Serbia volverá a ser el centro del mundo". La gente, con botellas de champán y cerveza, brindaban divertidos por 1997. Un grupo de estudiantes pasaba una bandeja de papel aluminio que contenía cerdo troceado. "Es cerdo de Dedinje", decían, en alusión al lugar donde está situada la presidencia.

El cantautor Djordje Balasevic, famoso por su canción Slobodan-ne, que es el vocativo del nombre del presidente y que también significa en serbio libertad no, comenzó una de sus canciones más populares. Todos los cantantes más prohibidos del régimen subieron al escenario. Los estudiantes gritaban: "¡Anda, vamos, todos al ataque!", que es el grito de guerra del equipo de fútbol Estrella Roja. Cerca de la una de la mañana, otro célebre cantautor llamado Bora Djordjevic entonó su tema El ángel blanco, basado en una obra maestra de la pintura serbia. La canción dice: "Ellos nos han convertido en esclavos. Los esclavos esperan salvación de ti, ángel. Sus manos están llenas de sangre. Levanta tu espada, ángel (... ) Ángel de la venganza, que el castigo caiga sobre ellos".

La policía de Slobodan Milosevic, tan popular por estas calles durante los 55 días de protesta, no hizo aparición. Esta noche era una jornada especial. Mañana será otro día. La oposición al presidente serbio se enfrentará a partir de mañana contra la nueva política adoptada por el Gobierno: mano dura contra la protesta. A partir de hoy se sabrá si esta protesta va a continuar siendo pacífica o tenderá a los acontecimientos de 1991, cuando Milosevic sacó los carros de combate a la calle para parar a los estudiantes. Éstos ya han dejado claro que no aceptan los trucos del Gobierno: o aceptan todas sus condiciones, incluido el reconocimiento de la victoria de la oposición en las elecciones del 17 de noviembre, o la protesta seguirá para siempre.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_