_
_
_
_
_
La carrera hacia la Casa Blanca

McCain toma ventaja en las encuestas

Barack Obama pasa al ataque en vísperas de la convención demócrata y de la designación de aspirante a la vicepresidencia

Antonio Caño

A las puertas de la gran semana demócrata -la convención y la designación de aspirante a la vicepresidencia-, el candidato republicano, John McCain, se ha puesto por primera vez por delante en algunas encuestas, confirmando el éxito de su actual estrategia y poniendo en evidencia los problemas de su rival, Barack Obama, que no acaba de encontrar el perfil adecuado en este momento decisivo de la carrera electoral.

McCain derrota a Obama por 46% a 41% en la encuesta de la compañía Zogby hecha pública ayer por la agencia Reuters. Hace un mes, ese mismo sondeo daba al candidato demócrata una victoria por siete puntos.

Más información
El decisivo voto del joven latino

Obama conserva aún una ventaja de dos puntos en otro sondeo publicado ayer por Los Angeles Times y Bloomberg, pero eso representa también una caída de 10 puntos respecto a la encuesta del mes anterior en esos medios. El candidato demócrata se mantiene por delante por 1,2 puntos porcentuales en la media de encuestas que actualiza cada día la página web RealClearPolitics, aunque esa cifra es la más baja desde que esa medición comenzó.

Los márgenes de Obama se acortan en los Estados en los que iba con ventaja, mientras que McCain alarga sus diferencias en aquellos en los que él iba por delante. Peor aún para los demócratas, la encuesta de Zogby-Reuters muestra que un 49% confía en el manejo que McCain puede hacer de la economía, la principal preocupación de los votantes, frente al 40% de Obama.

Estamos apenas en los primeros días de la verdadera campaña presidencial y pocas conclusiones contundentes pueden extraerse aún de estos datos, que pueden todavía variar sensiblemente en una u otra dirección. Pero sí puede predecirse una campaña muy disputada en la que el fuerte desgaste de la actual Administración republicana, tanto por la guerra de Irak como por la situación económica, favorece menos de lo previsto al candidato demócrata.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

¿Qué parte de culpa tiene de eso el propio Obama? ¿Qué parte corresponde a los méritos de McCain? Cada respectivo cuartel general intenta responder a estas preguntas y readaptar sus estrategias a las circunstancias. Una de las primeras respuestas que ha surgido es la de que McCain y su mensaje han renacido desde que cambió su equipo y colocó al frente a Steve Schmidt, un antiguo colaborador de Karl Rove (el asesor de George Bush) y un gran imitador de sus particulares técnicas de campaña.

"No hay duda de que la campaña de descrédito de Obama está dando sus frutos en estos momentos", opina el encuestador John Zogby.

Desde hace varias semanas, en confluencia con la publicación de un libro best seller contra Obama y de numerosos artículos y reportajes periodísticos sobre sus puntos débiles, la campaña de McCain ha emitido anuncios en televisión perfilando al candidato demócrata como un político egocéntrico y arrogante que no dudaría en traicionar a su país en Irak con tal de obtener la presidencia. Obama ha sido día tras día el tema principal de los discursos de McCain, que quiere -y está consiguiendo- convertir estas elecciones en un referéndum sobre el novato senador de Illinois.

Distraído en su gira mundial, en su descanso familiar y en las conversaciones para elegir vicepresidente, Obama no había respondido hasta ahora a esos ataques, pese a la presión desde su propio partido, donde, como ha reconocido Obama, han empezado a cundir los nervios.

Ayer respondió por primera vez. En un discurso en Martinsville (Virginia), Obama se extendió en comparaciones entre McCain y Bush, y repitió el eslogan de que el país no puede permitirse continuar con "la misma economía de los últimos ocho años".

Al mismo tiempo, la campaña demócrata ha comenzado a emitir anuncios en televisión en los que se recuerda a los votantes todas las veces que McCain ha votado junto a Bush en una amplia gama de asuntos, desde la guerra de Irak hasta la energía. El objetivo es añadir agresividad al discurso del aspirante y mala intención a la publicidad.

Hay que esperar para comprobar si esta estrategia le resulta rentable a un candidato que había prometido desde el principio conducir otro tipo de campaña, distinta de la tradicional guerra de guerrillas que suele librarse cada cuatro años en el otoño de la carrera presidencial.

Todo eso se verá con mayor claridad en la convención demócrata, que comienza el lunes en Denver (Colorado). Allí se fijará la plataforma y el estilo con el que Obama intentará llegar a la Casa Blanca. Antes tiene que anunciar una decisión de enorme relevancia también: el nombre de su vicepresidente. Ya se ha anunciado extraoficialmente que el ticket demócrata comparecerá junto por primera vez el próximo sábado en Springfield (Illinois), el mismo lugar en el que Obama anunció formalmente su candidatura en febrero de 2007.

¿Quién subirá junto a Obama a ese escenario? El máximo favorito de la prensa es el senador Joe Biden, un veterano experto en política exterior que el pasado fin de semana viajó a Tbilisi, la capital de Georgia, para recordar a todos sus credenciales en esa materia. Nadie duda de sus condiciones, pero su larga trayectoria en Washington no encaja muy bien con el mensaje de cambio predicado por Obama. Otros potenciales aspirantes se adaptan mejor a esa exigencia: la gobernadora de Kansas, Kathleen Sebelius, el senador de Indiana Evan Bayh y el gobernador de Virginia, Tim Kaine.

Los clientes de un hotel en Raleig (Carolina del Norte) fotografían a Barack Obama a su llegada a la ciudad.
Los clientes de un hotel en Raleig (Carolina del Norte) fotografían a Barack Obama a su llegada a la ciudad.AFP

Remontada republicana

- Cinco puntos de ventaja da el sondeo de agosto de Zogby-Reuters al candidato republicano a la Casa Blanca, John McCain (46% de intención de voto), frente su rival, el senador demócrata Barack Obama (41%). El 13% restante se confiesa indeciso, o no votaría por ninguno.

- La media de las encuestas efectuada a diario por la web RealClearPolitics mantiene a Obama en cabeza, con 1,2 puntos por encima de McCain. Es la ventaja más corta registrada desde que comenzó la medición.

- El avance republicano le da la vuelta a la tortilla, en un duelo electoral en el que Obama parecía claro favorito en julio, cuando el sondeo de Zogby-Reuters auguraba una clara ventaja (47%) sobre el senador de Arizona (40%).

- La estrategia de McCain, quien ha basado sus últimas intervenciones en desacreditar a su rival por su inexperiencia y en erigirse como la mejor opción ante la crisis económica, parece haber dado sus frutos.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_