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Muere a los 94 años Lucie Aubrac, símbolo de la resistencia francesa a la ocupación nazi

Chirac destaca su "audacia y valor" y su compromiso con "todos los grandes combates modernos de la República"

Lucie Aubrac, una de las heroínas de la resistencia a la ocupación nazi de Francia durante la Segunda Guerra Mundial, murió ayer a los 94 años en el hospital suizo de París, ha anunciado su marido, Raymond Samuel. La leyenda de Aubrac se fraguó en la clandestinidad cuando protagonizó diversas y sonadas operaciones de sabotaje y rescate de compañeros de armas, sobre todo su marido, al que arrebató del poder de los nazis hasta en tres ocasiones.

Nacida en el seno de una familia de cultivadores de viña de la región de Borgoña en junio de 1912, desde joven fue militante de las Juventudes Comunistas, se hizo profesora de Historia y trabajó como tal en Estrasburgo, donde conoció a finales de los años 30 a su marido, lo que marcaría por siempre su implicación en la guerra. Así en agosto de 1940 organizó por primera vez la evasión de éste de la prisión de Sarrebourg (este de Francia) y en otoño de ese mismo año con el periodista Emmanuel d'Astier organizó un pequeño grupo clandestino, La última columna, y creó un periódico, también clandestino, titulado Libération.

A partir de noviembre de 1942 se puso al frente de un comando que organizaba evasiones de detenidos por su vinculación con resistencia, y así en mayo de 1943 logró liberar a su marido, arrestado dos meses antes. En junio de 1943 su esposo volvió a ser detenido con Jean Moulin, uno de los líderes de la resistencia a los nazis en Francia, y con una decena más de activistas cerca de Lyon.

Lucie Aubrac consiguió de nuevo liberar a su esposo y a otros 13 miembros de la resistencia durante un traslado cuatro meses más tarde. En febrero de 1944, y sabiéndose buscada intensamente por la Gestapo, huyó a Londres con un hijo pequeño y embarazada de la que sería su hija.

Al final de la guerra, volvió con su marido a Francia, que fue nombrado primero comisario de la República (delegado del Gobierno) en Marsella, y luego tuvo otros cargos políticos en París. Lucie Aubrac continuó con su activismo político a través de Amnistía Internacional y la Red de Mujeres por la paridad, que entre otras acciones se destacó por su implicación en favor de los inmigrantes sin papeles.

El presidente francés, Jacques Chirac, ha lamentado la " gran perdida para Francia" que supone el fallecimiento de esta "figura emblemática" de la implicación de las mujeres en la Resistencia" y cuya "audacia y valor" con "todos los grandes combates modernos de la República" perdurarán en el recuerdo de sus compatriotas. Aubrac, cuyo valor y tenacidad contribuyeron a "lavar el honor perdido de Francia", quedará "para siempre en nuestra memoria y la de nuestros hijos como un símbolo de honor y un ideal para todos los franceses", ha afirmado, por su parte, el primer ministro, Dominique de Villepin.

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Lucie Aubrac, en una foto de 1991.
Lucie Aubrac, en una foto de 1991.AP

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