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Entrevista:PHILLIP GORDON | Secretario de Estado adjunto de EE UU para Europa

"La OTAN ya es un agente global"

Phillip Gordon, secretario de Estado adjunto para Asuntos Europeos desde el 15 de mayo, politólogo especialista en el Viejo Continente con ocasionales saltos a la política práctica, antiguo colaborador en la Administración presidida por Bill Clinton, empezó a aconsejar a Barack Obama sobre asuntos europeos en 2007. En una escala en Bruselas ha explicado a los embajadores de la OTAN la cumbre de Moscú y ha cenado con actores institucionales de la UE. Gordon asegura que Washington necesita una Europa fuerte y unida para hacer frente a los desafíos del siglo XXI y, con respecto a la OTAN, da por zanjado un debate que para otros no lo está: "La OTAN ya es global".

Pregunta. ¿Cuál es su valoración de la cumbre de Moscú, que no ha dejado del todo satisfechos a los rusos?

"No podemos hacer frente solos a los problemas del mundo"
"Georgia crea un grave desacuerdo en la comunidad internacional"

Respuesta. Ha ido muy bien. Barack Obama llegó a la Casa Blanca con la idea de que las relaciones americano-rusas se habían deteriorado mucho en los últimos años y que había que establecer una relación más constructiva con Moscú, cooperar en áreas en las que tenemos intereses comunes, aun reconociendo que hay diferencias y que no vamos a estar de acuerdo en todo. El presidente ha estado explorando si podemos hacerlo y hemos demostrado en Moscú que sí podemos. Hay que tener en cuenta que sólo han pasado seis meses desde que es presidente y tres desde que se reunió con el presidente Dmitri Medvédev en Londres. Hemos dejado Moscú con una serie de acuerdos...

P. Pero no sobre el escudo antimisiles que tanta ansiedad provoca en Moscú.

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R. Sí, la crea y seguimos teniendo diferencias. Pero hicimos una declaración conjunta sobre la defensa antimisiles que no se esperaba, porque Rusia venía insistiendo en que si queríamos una declaración conjunta o un acuerdo para cooperar tendríamos que renunciar al tercer sitio [el despliegue de misiles en Europa]. Y nos negábamos a ello. Les explicamos que la defensa antimisiles está en revisión y que decidiremos sobre ella en función de la amenaza y la tecnología, no en función de lo que otros piensen. No estábamos dispuestos a sacrificar eso para hablar con los rusos y han acabado por aceptar. En la declaración conjunta se dice que vamos a cooperar en defensa antimisiles y que vamos a hacer una evaluación común de las amenazas balísticas y nucleares, incluidas Irán y Corea del Norte. Así que estamos muy satisfechos de haber conseguido que se pueda avanzar en defensa antimisiles sin haber sacrificado nuestra posición.

P. Usted dice que hay que establecer un auténtico pacto con Europa. ¿Qué significa?

R. Que nosotros no podemos hacer frente solos a los problemas del mundo, sea la crisis financiera, el cambio climático, Irán, Afganistán, Rusia o la energía. Cuando miramos alrededor para ver quién nos puede ayudar a conseguir nuestros objetivos, los aliados europeos están con frecuencia en lo alto de la lista. Así que cuanto más cooperemos con una Europa fuerte y unida, mejor.

P. ¿No parece muchas veces Europa más un magma que fuerte y unida?

R. Está cada vez más fuerte y poco a poco va convirtiéndose en un agente global. Es cierto que hay diferencias entre los europeos. Y contratiempos. Y que a veces parece más un magma informe que fuerte y unida. Si el Tratado de Lisboa es ratificado será un paso adelante hacia el socio fuerte que deseamos.

P. Esa Europa fuerte y unida intervino con éxito el pasado verano en la guerra de Georgia con Rusia. El informe de una comisión internacional independiente sobre la génesis del conflicto se va a retrasar unos meses. Alguna filtración apunta a que es crítico con el presidente Mijaíl Saakash-vili. ¿Es Georgia un problema para Occidente?

R. No he visto el informe. Supongo que será equilibrado, porque la situación es compleja...

P. Precisamente porque parece muy duro con Saakashvili es por lo que se ha retrasado hasta septiembre...

R. Es una situación complicada en la que atribuir un 100% de responsabilidad y culpa a una parte no suele ser lo más acertado. Georgia es un problema porque hay un grave desacuerdo con la comunidad internacional. Rusia no sólo reconoce sino que tiene importante presencia militar en partes [Abjazia y Osetia del Sur] de una Georgia soberana e independiente. Ése es uno de los desacuerdos importantes que tenemos con Rusia. Los rusos no han cumplido el acuerdo de devolver a sus tropas a las posiciones anteriores al 7 de agosto, ni permiten ayuda humanitaria, ni la entrada de observadores. No estamos de acuerdo en su reconocimiento [de los secesionistas].

P. El aval de Estados Unidos al ingreso de Georgia en la OTAN es una de las razones de la tensión con Rusia. Usted defiende la ampliación de la OTAN. ¿Hay límites a esa ampliación?

R. No hay que poner un límite artificial a la ampliación. La puerta está abierta a los países democráticos en Europa. Cuando cumplan los criterios, contribuyan a la seguridad, sus Gobiernos lo soliciten, basados en el apoyo de la población, y haya consenso en la OTAN de que deben entrar, deben entrar.

P. ¿Debería la OTAN convertirse en una alianza global?

R. La OTAN está inmersa en una gran operación en Afganistán, ya es global. Ese debate está superado. Pero no sólo es global, porque también tienen responsabilidades en Europa, con el artículo 5 y la autodefensa. Ya no hay que discutir si la OTAN tiene un papel global. Claramente lo tiene.

P. Usted tradujo al inglés Testimonio, el libro de Nicolas Sarkozy. ¿Qué le llamó la atención?

R. Lo escribió cuando era ministro y ya he tenido ocasión de verle varias veces como presidente. El libro refleja su personalidad, su increíble energía, ambición y fuerza. Está clara en su historia personal y en su presidencia de Francia, como lo estuvo en la presidencia francesa de la UE.

P. Es una descripción psicológica. ¿Y en términos políticos?

R. Tiene grandes ambiciones para Francia y para Europa. Y su personalidad se manifiesta...

P. ¿Una personalidad a la americana, la de creer que todo es posible si lo intentas?

R. Yo no le etiquetaría como americano. Eso lo pueden hacer otros. Él cree a pies juntillas que con voluntad política y energía y deseo se pueden conseguir las cosas. Reconozco que es una característica muy americana, que rompe con la tendencia europea de ser más cauto y conservador.

El secretario de Estado adjunto de EE UU para Asuntos Europeos, Phillip Gordon.
El secretario de Estado adjunto de EE UU para Asuntos Europeos, Phillip Gordon.AFP

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