_
_
_
_
_
EL 'CASO PINOCHET'

Garzón intenta que la enajenación mental no se use para liberar a Pinochet

El Ministerio británico del Interior espera a las cinco de la tarde de hoy (seis de la tarde hora peninsular española) las respuestas a las preguntas que formuló el pasado viernes 21 al juez Baltasar Garzón, a Amnistía Internacional y a otras organizaciones de derechos humanos, así como a la defensa del general Augusto Pinochet, a fin de adoptar la decisión formal sobre la liberación del ex dictador. Garzón enviará hoy por la mañana sus respuestas a Londres sobre la enajenación mental en la ley española con la voluntad de que no sean utilizadas para justificar la liberación de Pinochet.

La fórmula de la "enajenación mental" que prevé el artículo 383 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal española parece la preferida en el Ministerio del Interior británico. La idea es que las dolencias físicas que aquejan al ex dictador han producido en su mente una incapacidad para someterse a juicio, entendida esta incapacidad como un estado en el que Pinochet no está en condiciones de entender los cargos que se formulan contra él, tiene dificultades para seguir un juicio y tampoco podría dar instrucciones coherentes a sus abogados para que le defiendan.A esta fórmula se agrega un elemento aportado por la defensa del general Pinochet, tras consultas con los abogados españoles que llevan el caso en Madrid, y es el de que en las citadas condiciones de incapacidad, un enjuiciamiento del ex dictador en Madrid violaría la Constitución Española, ya que el acusado no podría ejercer su derecho a una auténtica defensa. La defensa del ex dictador afirma también que en esas condiciones mentales y físicas de incapacidad, un juicio a Pinochet vulneraría la Convención Europea de Derechos Humanos. La defensa estima, además, que un juicio en España no podría tener lugar antes de un año y medio después de la llegada del ex dictador a Madrid, contra la previsión de cuatro meses del juez Garzón.

Las preguntas planteadas por el Ministerio del Interior sobre enajenación mental, su concepto clínico y legal y las posibilidades de que si Pinochet fuese entregado a las autoridades españolas sería eximido de comparecer, por su presunto estado de incapacidad, a juicio, han sido acogidas por las partes que buscan bloquear la liberación del ex dictador como un arma de doble filo. Las alegaciones que se van a presentar hoy vuelven a insistir en que el informe médico debe ser entregado para su conocimiento, hecho que permitiría entrar en el fondo de si Pinochet está o no en condiciones de someterse a juicio.

Rechazo de España

Asimismo, una vez que el Gobierno español ya ha rechazado definitivamente la presentación de un recurso de revisión judicial ante la eventual liberación de Pinochet, esta acción queda en manos, teóricamente, de otros Gobiernos, de Amnistía Internacional y otras organizaciones de derechos humanos. Es previsible que en esta carrera contrarreloj, un recurso, de presentarse, sea dirigido ante el Alto Tribunal de Justicia antes de que Straw anuncie su resolución.

[El Gobierno de Bélgica anunció ayer que está dispuesto a interponer un recurso a partir de hoy ante el Alto Tribunal de Londres para impedir la liberación de Pinochet, según indicó Louis Michel, portavoz del ministerio belga de Exteriores. "Apelaremos a esta Corte de manera preventiva con el fin de impedir cualquier decisión británica que tenga como consecuencia el regreso de Pinochet a Chile", dijo Michel. El recurso se introducirá en función de la decisión del ministro británico del Interior, Jack Straw, informa France Presse]

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_