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Crisis política en Centroamérica

Porfirio Lobo, el hombre del cambio

El ganador de las elecciones ofrece un diálogo abierto, "sin descartar a nadie" - La abstención fue del 40%, inferior a la registrada en los comicios de 2005

Francisco Peregil

No hubo sorpresas. En las elecciones de Honduras ganó el domingo quien tenía todas las papeletas para ganar; el único de los cinco candidatos presidenciales que salía como vencedor en todos los sondeos, el que más se distanció del presidente golpista Roberto Micheletti y del depuesto Manuel Zelaya ("no tengo nada que ver ni con uno ni con otro, ellos son liberales y yo del Partido Nacional"), y el que menos rechazo provoca en los zelayistas: Porfirio Lobo Sosa, conocido como Pepe Lobo, un terrateniente de 62 años, casado y padre de 11 hijos, licenciado en Administración de Empresas en la Universidad de Miami y cinturón negro de kárate.

Lobo se definió ayer como un partidario del "centro humanismo", sin ahondar más en su ideología. Tampoco su programa electoral ofrece más pistas sobre su política. Se sabe que en las elecciones de 2005, que perdió por sólo tres puntos porcentuales contra Manuel Zelaya, defendió la mano dura contra el crimen y la pena de muerte. Pero el líder del partido más conservador de Honduras ha reconocido que aquello fue un error estratégico y se ha presentado esta vez como el hombre del cambio. Quienes lo conocen aseguran que aquella imagen de duro no iba con la personalidad de un hombre afable que nunca pierde la sonrisa, que formó parte en los ochenta de organizaciones pro derechos humanos.

Terrateniente y padre de 11 hijos, Lobo es cinturón negro de kárate
Reconoce que su defensa en el pasado de la "mano dura' fue un error
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Quedan casi dos meses hasta que el 27 de enero tome posesión del cargo, pero desde anoche, en su primer discurso como presidente electo, Pepe Lobo se apresuró a extender la mano a todos los hondureños. La cuestión está en saber si la mano llegará a la Embajada de Brasil, donde Zelaya cumplía 69 jornadas cercado por el Ejército. En una supuesta alusión a Zelaya, Lobo dijo que promoverá un "diálogo abierto, amplio, sin descartar a nadie". "Haremos un Gobierno de unidad nacional, de reconciliación, no es tiempo ya de más divisiones", añadió.

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Desde la Embajada de Brasil, en conversación telefónica con este diario, Manuel Zelaya indicó: "Un político siempre ha de estar dispuesto al diálogo, pero no al diálogo falso. Yo tengo amistad personal con Lobo, pero diferencias políticas. De momento, Lobo no se ha puesto en contacto conmigo. Si el diálogo es para legitimar el golpe o para reconocer un fraude, que no cuenten conmigo. Estas elecciones se han celebrado sin presencia de observadores de la UE, ni de la ONU, ni de la Organización de Estados Americanos (OEA) y está claro que han hinchado los resultados".

El zelayista Frente Nacional de Resistencia no quiso, de momento, recoger el guante de Pepe Lobo. "Nosotros dijimos que no reconoceríamos el Gobierno que saliera de estas elecciones fraudulentas", indicó Rodil Rivera, asesor jurídico de Zelaya. "Así que pedimos la restitución incondicional de Zelaya y el juicio a los golpistas. Sobre la propuesta de diálogo no nos pronunciamos porque, de momento, no nos la han hecho directamente a nosotros".

Los zelayista creen que Lobo es el candidato menos malo de los dos que se presentaban con más opciones. "Lobo es un hombre de centro en un partido de derechas donde la ultraderecha es muy dominante", comentó el analista hondureño José Manuel Torres. "Él no se opuso nunca a la consulta que Zelaya quiso hacer sobre la reforma de la Constitución y que ocasionó el golpe de Estado. Tiene interlocutores dentro de la izquierda. Y ahora tendrá que dialogar con ellos. Pero los sucesos del 28 de junio [cuando Zelaya sufrió el golpe de Estado] han demostrado que el poder verdadero lo ostentan un grupo reducido de familias. Esas familias tienen el poder incluso de sacar a los militares a la calle. Y Pepe deberá consensuar con ellas, no tendrá las manos libres para actuar".

Lobo agradeció al Ejército y la policía los servicios prestados en las elecciones del país. "En nuestro Gobierno haremos que cada una de estas dos instituciones mantenga su independencia y su profesionalismo y que únicamente estén subordinadas a la Constitución de la República", declaró.

[El vencedor de los comicios expresó anoche su deseo de que el Príncipe de Asturias asista a su toma de posesión, y manifestó su confianza en conseguir el reconocimiento de su elección por parte del Gobierno español para entonces, informa Efe]. Lobo ganó con una ventaja de 17 puntos porcentuales sobre el candidato del Partido Liberal, Elvin Santos, la mayor distancia en la historia democrática de Honduras.

No obstante, el Tribunal Supremo Electoral no facilitó ayer los datos totales sobre abstención. Dado que los zelayistas habían llamado al boicoteo, el dato tenía interés. Con el 60% escrutado, el órgano indicó que la abstención fue del 40%, menor al 45% registrado en los comicios de 2005. Pero los zelayistas sostienen que la abstención superó el 60%.

Porfirio Lobo se dirige a simpatizantes en Tegucigalpa para celebrar la victoria.
Porfirio Lobo se dirige a simpatizantes en Tegucigalpa para celebrar la victoria.AP

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Sobre la firma

Francisco Peregil
Redactor de la sección Internacional. Comenzó en El País en 1989 y ha desempeñado coberturas en países como Venezuela, Haití, Libia, Irak y Afganistán. Ha sido corresponsal en Buenos Aires para Sudamérica y corresponsal para el Magreb. Es autor de las novelas 'Era tan bella', –mención especial del jurado del Premio Nadal en 2000– y 'Manuela'.

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