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Israel endurece la represión en los territorios ocupados

Las fuerzas israelíes dinamitaron el domingo cuatro nuevas casas palestinas en la Cisjordania ocupada, cuyos habitantes eran sospechosos de haber lanzado cócteles molotov contra autobuses israelíes. Según los observadores, esta acción refleja la nueva política del ministro de Defensa, Ariel Sharon, de "represión dura" frente a la población árabe en los territorios ocupados.El general en la reserva Ariel Sharon está decidido, al parecer, a "reprimir duramente" cualquier actividad dirigida contra el Estado de Israel, mientras que está dispuesto a un política de "tolerancia" hacia los palestinos que no se mezclan en las acciones o actos de propaganda favorables a la Organización para la Liberación de Palestina (OLP).

En las últimas dos semanas fueron también dinamitadas siete casas palestinas. Sin embargo, este retorno a la política de "castigos colectivos" -que estrenó en 1968 Moshe Dayan-, en los que familias completas ven su casa destruida porque un hijo o un hermano son acusados, sin haber sido juzgados, de haber participado en actos antiisraelíes, no ha servido para devolver la calma a la Cisjordania ocupada. Los jóvenes siguen manifestándose en las calles de Nablus, Ramallah, Jerusalén oriental, Beth Sahur o Jenin.

Ayer por la mañana centenares de jóvenes desfilaron por las calles de Beth Sahur. Fue proclamado el estado de sitio en esta localidad y dinamitadas tres casas en represalia por los lanzamientos de piedras contra autobuses israelíes. Esta es la primera vez que las autoridades adoptan una actitud tan drástica por motivos tan leves.

Los incidentes de Beth Sahur y Jenin consituyen una novedad. Hasta ahora estas dos ciudades eran consideradas como menos activas contra la presencia israelí que, por ejemplo, Nablus o Ramallah. Las autoridades hebreas las consideraban incluso como un muestra de "coexistencia".

Los acontencimientos de Beth Sahur, una pequeña localidad palestina poblada fundamentalmente por cristianos, han sorprendido a las autoridades israelíes. Todo parece indicar que la separación de poderes en los territorios ocupados entre el Gobierno militar y una administración civil creada recientemente por Ariel Sharon no está contribuyendo a apaciguar los ánimos. "Sharon cree que va a tener éxito en algo en lo que fracasó Dayan. Se equivoca totalmente", afirma un estudiante de 17 años en Beth Sahur. Al preguntarle el porqué de esta apreciación, responde: "Los palestinos somos ahora más fuertes que hace diez años y también ha cambiado el mundo exterior. 1981 no es 1971. La causa palestina ya no está huérfana".

Desde 1967, la ocupación de Cisjordania se ha traducido, entre otras cosas, por la destrucción de centenares de casas pertenecientes a palestinos sospechosos de actividades hostiles contra el Estado hebreo.

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