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Sarkozy quiere "reinventar la ciudad" con un ambicioso plan en los suburbios

Francia destinará 500 millones de euros para los conflictivos barrios periféricos.- El presidente francés declara "una lucha sin cuartel" contra los alborotadores pese a las ayudas

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, ha presentado hoy en el Elíseo su plan para los conflictivos barrios periféricos destinado especialmente a los jóvenes y cuyos grandes ejes son la educación, el empleo, el transporte y la seguridad, aunque ha querido recordar su promesa de mantener "una lucha sin cuartel" contra "gamberros" y "traficantes".

Según el proyecto, el Estado destinará 500 millones de euros en cinco años para financiar medios de transporte público y sacar del aislamiento a esos barrios. Uno de los grandes puntos del plan son las infraestructuras. En palabras del propio Sarkozy, el objetivo es "reinventar la ciudad" a través de medidas para acabar con las deficiencias estructurales de los suburbios.

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Otro punto imporante del proyecto son los habitantes de esos barrios pobres. El plan prevé otorgar ayuda a unos 100.000 jóvenes para encontrar empleo en los próximos tres años o fomentar la creación de las llamadas "escuelas de la segunda oportunidad" para los que abandonan los estudios sin calificación.

Sin embargo, Sarkozy ha sido contundente contra los autores de los disturbios a los que ha calificado de "gamberros y traficantes". El presidente francés ha declarado "una guerra sin cuartel" a los alborotadores y ha anunciado que 4.000 policías adicionales serán desplegados en tres años en los barrios "sensibles" para mantener el orden y combatir las llamadas violencias urbanas.

"Pondremos fin a la ley de las pandillas, del silencio, de los tráficos" y se emprenderá "una lucha sin cuartel contra los traficantes de drogas, los mafiosos y los gamberros", ha subrayado Sarkozy.

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Graves disturbios

El pasado mes de noviembre se desató una crisis en los barrios de Villiers-le-Bel, al norte de París, tras el accidente que costó la vida a dos jóvenes que murieron al ser atropellados por un coche de policía. Se sucedieron noches de violentos disturbios y decenas de detenciones que volvieron a recordar a la grave crisis del otoño de 2005, cuando ardieron miles de coches en los barrios pobres de París mientras policía y jóvenes se enfrentaban en las calles. Los incidentes encendieron de nuevo todas las alarmas en la sociedad gala y Sarkozy ya habló entonces de detener la ola de violencia y tomar medidas contra los alborotadores.

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, presenta su plan para los suburbios en una rueda de prensa en el palacio Elíseo.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, presenta su plan para los suburbios en una rueda de prensa en el palacio Elíseo.REUTERS

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