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Europa convulsa

La UE consagra el principio de austeridad

25 Estados se sumarán al nuevo Tratado para lograr el equilibrio presupuestario - República Checa se une al rechazo británico al acuerdo económico de la Unión

Claudi Pérez

Veinticinco líderes europeos cerraron anoche un acuerdo sobre el Tratado Internacional que consagra la austeridad presupuestaria en la zona euro. Checos y británicos se quedaron fuera. El texto establece que "la posición presupuestaria de los Gobiernos será equilibrada o de superávit". En la práctica se traduce en que se permitirá a los Estados un déficit máximo del 0,5% del producto interior bruto, (PIB). Esta norma, conocida como regla de oro, deberá integrarse obligatoriamente en las Constituciones de los Estados firmantes, que serán los 17 del euro y el resto de la UE voluntariamente excepto Reino Unido, que ya rechazó el acuerdo en diciembre, y República Checa, donde los partidos euroescépticos controlan el Parlamento y la Presidencia. La celebración de un Tratado Internacional entre los países del euro y los demás de la UE que lo suscriban voluntariamente fue consecuencia de la negativa del Reino Unido a modificar el Tratado de la Unión para reforzar la disciplina fiscal y la coordinación económica, para lo que se requiere unanimidad. La impulsora de fondo de la austeridad ha sido la canciller alemana, Angela Merkel, que ha fijado estas exigencias como condición previa para autorizar un papel más activo del Banco Central Europeo y aumentar la cuantía del fondo de rescate para los países con dificultades.

Los polacos exigen presencia en las reuniones de los líderes del euro
La impulsora de fondo de la austeridad ha sido Angela Merkel
Está previsto que el nuevo Tratado entre en vigor el 1 de enero de 2013
El texto cuenta en principio con apoyo de los 17 países de la zona euro
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El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, manifestó ayer su satisfacción porque todos los líderes europeos pudieran llegar a la cumbre a pesar de la huelga general. El presidente europeo expresó su respaldo al contenido del Tratado aunque incluyó ciertos matices. "Debemos continuar reduciendo la deuda pública", dijo, "estabilizar la eurozona y garantizar al mismo tiempo el crecimiento y el empleo". Insistió en que hay que "reducir el déficit, pero no nuestras inversiones de futuro como en educación o en economía verde".

El recién nombrado presidente de la Eurocámara, Martin Schulz, se mostró más preciso al señalar que "reducir la deuda es una cuestión de justicia intergeneracional", pero advirtió de que "los presupuestos sostenibles son esenciales, pero solo cuando van acompañados de inversión". El socialista Schulz insistió en que Europa necesita inversión para estimular el crecimiento económico y reforzar la demanda.

Uno de los últimos puntos conflictivos ha sido la exigencia de Polonia de tener una mayor presencia en las reuniones de los líderes del euro. El quinto borrador dispone que se podrá invitar a los países que hayan ratificado el tratado, aunque no tengan la moneda única, a las cumbres del euro "cuando sea apropiado al menos una vez al año", sin las exigencias adicionales establecidas en los borradores previos. Los dirigentes polacos lamentaban tener que dejar las reuniones de la UE, cuando empezaba un posterior encuentro de los 17 del euro. Polonia ha obtenido el apoyo de República Checa, Hungría y Eslovaquia. Francia ha sido el país más reticente a permitir la presencia polaca en estas cumbres del euro.

El texto del Tratado Internacional otorga poderes a la Comisión Europea y a cualquiera de los demás Estados firmantes para llevar al Tribunal de la Unión Europea, con sede en Luxemburgo, al país que no haya inscrito adecuadamente en su Constitución o norma similar la exigencia del equilibrio presupuestario. El Tribunal podrá imponer sanciones económicas de hasta el 0,1% a los países que no hayan incorporado en su legislación la regla de oro. El producto de las multas se destinará al Mecanismo Europeo de Estabilización (MEDE) en el caso de los países del euro y al presupuesto comunitario, en el resto.

El tratado que debía ser aprobado ayer será firmado por los líderes el próximo 1 de marzo. Está previsto que entre en vigor a partir del 1 de enero de 2013, siempre que lo hayan aprobado 12 Estados miembros cuya moneda sea el euro. En principio, no se prevén demasiadas dificultades para su ratificación. El primer ministro de Irlanda, Enda Kenny, aseguró ayer que no tiene ninguna preocupación por la posibilidad de celebrar un referéndum. "He dejado claro", dijo, "que, cuando el texto esté terminado, pediré a la fiscal general que suministre al Gobierno su valoración sobre si el texto acordado, está de acuerdo con nuestra Constitución".

Los líderes aprobaron también el adelanto de la entrada en vigor del MEDE al 1 de julio de 2012, un año antes de lo acordado el año pasado, confirmando el acuerdo del Ecofin de la semana pasada. El debate de fondo sobre la elevación de su capacidad de este fondo desde los 500.000 millones actuales a los 750.000 millones, se decidirá en la próxima cumbre de primeros de marzo.

El Tratado Intergubernamental dispone una precisa condicionalidad entre su firma y la posibilidad de recibir ayudas. Solo podrán ser receptores de la asistencia financiera del MEDE, los Estados que hayan ratificado el Tratado Intergubernamental.

El Tratado Internacional dispone también que en los supuestos de los países que hayan registrado desviaciones significativas de los objetivos de ajuste, "un mecanismo de corrección se activará automáticamente". Asimismo reitera una de las normas aprobadas en la legislación secundaria que dispone que cuando un país haya superado el límite del 60% de deuda, deberá reducir el excedente a un ritmo de una veinteava parte cada año.

Jose Manuel Durão Barroso junto a Angela Merkel y, detrás, Mario Monti y Mariano Rajoy conversan ayer en Bruselas.
Jose Manuel Durão Barroso junto a Angela Merkel y, detrás, Mario Monti y Mariano Rajoy conversan ayer en Bruselas.HORST WAGNER (EFE)

Las claves de la cumbre europea

- El texto permitirá a los Estados un déficit máximo del 0,5%. Esta norma es conocida como la regla de oro.

- Uno de los últimos puntos conflictivos ha sido la exigencia de Polonia de tener una mayor presencia en las reuniones de los líderes del euro.

- El Tribunal podrá imponer sanciones económicas de hasta el 0,1% a los países que hayan incorporado a su legislación la regla de oro.

- Los líderes aprobaron el adelanto de la entrada en vigor del Mecanismo Europeo de Estabilización (MEDE) al 1 de julio de 2012.

- El monto de las sanciones se destinará al Mecanismo de Estabilización.

- El debate sobre la elevación de la capacidad de este fondo desde los 500.000 millones actuales a los 750.000 millones se decidirá en marzo.

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Sobre la firma

Claudi Pérez
Director adjunto de EL PAÍS. Excorresponsal político y económico, exredactor jefe de política nacional, excorresponsal en Bruselas durante toda la crisis del euro y anteriormente especialista en asuntos económicos internacionales. Premio Salvador de Madariaga. Madrid, y antes Bruselas, y aún antes Barcelona.
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