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Un amigo del ministro de Economía italiano le paga los 8.500 euros del alquiler de su casa

La orden de detención por corrupción de Marco Milanese, su fiel asesor político, salpica a Giulio Tremonti

La sombra de un nuevo escándalo político ha salpicado hoy de lleno al ministro de Economía italiano, Giulio Tremonti. Los jueces de Nápoles que investigan los oscuros negocios de la logia masónica P4 han ordenado arrestar a Marco Milanese, un diputado del Pueblo de la Libertad que ha sido el más fiel consejero político de Tremonti desde 2001 hasta hace solo unos días. Entre otras cosas, el auto judicial afirma que es Milanese quien paga el alquiler de 8.500 euros mensuales de la casa romana donde vive el titular del Tesoro.

La orden de arresto de Milanese, que dimitió de su cargo hace una semana y al hacerlo aseguró que las razones se conocerían "enseguida", se enmarca dentro del inquietante y confuso escenario revelado por la Fiscalía de Nápoles en torno a la P4, una organización que según la acusación pública comandaba el masón Luigi Bisignani desde la propia presidencia del Gobierno.

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La investigación sobre el consejero de Tremonti, separada de la indagación madre, ofrece nuevos elementos de chantajes cruzados, corrupción, lujos excesivos y ajustes de cuentas intestinos en el seno de la Guardia de Finanzas, la policía financiera de la que es oficial Marco Milanese, quien ha sido imputado por corrupción y revelación de secretos oficiales.

Según se ha sabido hoy, Tremonti fue llamado a declarar como persona informada de los hechos hace dos semanas por el fiscal Vincenzo Piscitelli, quien ha descubierto que el contrato de alquiler de la lujosa casa donde vive el ministro en Roma está a nombre del propio Milanese.

La fiscalía asegura que el piso donde habita Tremonti es propiedad de la institución caritativa Pio Sodalizio dei Piceni, y añade que se hicieron obras de reforma por valor de 200.000 euros que "Milanese nunca ha pagado". La sospecha de los fiscales es que la empresa que hizo las obras, la Edil Ars, no cobrara para devolver así algún favor a Milanese, quizá por haber obtenido contratos de la SOGEI, una sociedad controlada por el Ministerio de Economía.

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Esta mañana, la policía ha visitado algunos inmuebles del Pio Sodalizio dei Piceni que tiene alquilados Milanese, y ha registrado varias empresas privadas que según La Repubblica tienen "estrecho contacto" con el Ministerio de Economía.

Según la juez Amelia Primavera, que firma la orden de arresto, la relación entre Milanese y Tremonti sigue siendo "estrecha y próspera", y las relaciones financieras entre ambos están "muy poco claras", ya que un año antes de que fuera firmado el contrato con el Pio Sodalizio dei Piceni, Tremonti entregó a Milanese un cheque de 8.000 euros, lo que significa que proceden de "una partida económica diferente".

La juez revela además que, en su declaración judicial, Tremonti afirmó que en la Guardia de Finanzas hay "diversas corrientes enfrentadas entre ellas", y que "algunos representantes del Cuerpo mantienen un estrecho contacto con el presidente del Gobierno, Silvio Berlusconi".

Según los magistrados, Milanese ha tejido una red de influencias, poder y chantajes desde 2004 explotando su "posición privilegiada" de "asesor del ministro Giulio Tremonti y de alto oficial de la Guardia de Finanzas, como uno de los máximos exponentes del ministerio institucionalmente designados para reprimir la evasión fiscal".

El auto judicial afirma que Milanese, a cambio de dar información reservada sobre investigaciones de la Guardia de Finanzas, recibió del empresario Paolo Viscione "joyas, relojes, coches de lujo (Aston Martin y Ferrari), viajes y 450.000 euros en contante, por una suma total de más de un millón de euros".

El ministro de Economía italiano, Giulio Tremonti, y detrás el primer ministro, Silvio Berlusconi.
El ministro de Economía italiano, Giulio Tremonti, y detrás el primer ministro, Silvio Berlusconi.REUTERS

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