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Rusia alerta de riesgos en Kosovo

La OTAN mantendrá 16.000 soldados en la provincia por tiempo indefinido

El ministro ruso de Exteriores, Serguei Lavrov, pareció ayer dar por perdida la batalla al decir que "si Kosovo se resuelve como creemos que se va a resolver, sentará un precedente" que abrirá "una pendiente muy resbaladiza", con posibles consecuencias en Europa y otras partes del mundo. Condoleezza Rice, la secretaria de Estado norteamericana, le dio la razón sobre lo crítico de la coyuntura ante la inevitable independencia de la provincia serbia al reclamar la unidad de los aliados "en lo que va a ser un periodo difícil". Los aliados atendieron la llamada de Rice y acordaron mantener, y reforzar si fuera necesario, los cerca de 16.000 efectivos de la Fuerza de Seguridad para Kosovo (KFOR) dirigidos por la OTAN con el aval de la ONU.

Rice: "No dará estabilidad evitar decisiones que hay que tomar"

Ban Ki-moon, secretario general de la ONU, recibió ayer el informe de la troika (UE, Estados Unidos y Rusia) que ha estado mediando desde el verano entre serbios y albanokosovares en busca de un imposible acuerdo y pudo leer en la primera línea que los diplomáticos había sido incapaces de lograr un acuerdo. No hay propuestas sobre el estatus final. Las conversaciones fueron útiles porque ambas partes se comprometieron a evitar la violencia, pero nadie estuvo dispuesto a ceder en la soberanía. Serbia ofreció una autonomía con atributos casi de Estado independiente que Pristina rechazó porque no acepta otra cosa más que la independencia.

"La realidad es que el proceso de la troika ha llegado a su final. Y de lo que se oye está claro: hay que pasar a otra cosa", manifestó Rice al concluir la reunión de ministros de Exteriores de la OTAN que tuvo a Kosovo como asunto estelar.

Ya la noche anterior, los ministros habían discutido durante una cena la estrategia a seguir ante el desafío kosovar. Allí acordaron hacer un esfuerzo supremo de unidad, si no en lo diplomático, donde sigue habiendo diferencias, dado que no todos aprueban la independencia de Kosovo, al menos en lo relativo a la seguridad. "KFOR seguirá en Kosovo en virtud de la Resolución 1244 del Consejo de Seguridad salvo que el Consejo decida otra cosa", subrayaba el comunicado final de la reunión.

Los ministros europeos de la Alianza volverán el lunes sobre el asunto en su calidad de ministros de la UE para preparar el camino a la declaración que el día 14 deban realizar los jefes de Estado y de Gobierno comunitarios. La vía esta trazada y lleva a la independencia de Kosovo, declarada de acuerdo con Estados Unidos y la UE, en un proceso de diplomacia muy compleja sobre el que ayer nadie estaba en condiciones de ofrecer detalles.

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Volvió el ruso Lavrov a esgrimir idea de la caja de Pandora. "Hay que mirar a otros países, no sólo en los Balcanes, sino en otras partes del mundo". Pasó lista a las violaciones del derecho internacional que supondrá la independencia de la provincia arrancada a Serbia.

Rice mantuvo la tesis de que hay que cortar el nudo gordiano. "No va a dar estabilidad ignorar la realidad de la situación entre Belgrado y Pristina", con posiciones opuestas e irreconciliables. "Ni dará estabilidad evitar decisiones que por difíciles que sean hay que tomar".

"Hay mucho trabajo por hacer para conseguir el pleno compromiso con los principios contenido en el plan de Ahtisaari", advirtió la secretaria de Estado en referencia al proyecto de independencia supervisada concebido por el ex primer ministro finlandés, proyecto rechazado por Serbia y Rusia, a los que se ofreció como gesto de buena voluntad política la prolongación de las negociaciones dentro de la troika. A los aliados les interesa sobremanera el compromiso de dar garantías de seguridad e integridad física y patrimonial a los serbios en Kosovo.

Ahí entra la KFOR -fuerza que será reforzada en caso de necesidad y a cuyo uso no se impondrán limitaciones. En la declaración de ayer se advierte de que "la OTAN responderá decididamente a cualquier intento de dañar la seguridad de cualquier persona en Kosovo". Jaap de Hoop Scheffer, secretario general aliado, fue rotundo: "Nadie debe hacerse la ilusión de que la violencia es una solución. KFOR está preparada".

El proceso entra ahora en la definitiva fase diplomática con un ajustado calendario que debe llevar a un anuncio de declaración de independencia de Kosovo hacia mediados de enero, iniciativa que será seguida por reconocimientos individuales de los distintos países aliados. Eslovaquia, temerosa de su minoría húngara, al igual que Rumania, anunció ayer que no la reconocerá. Chipre tampoco quiere que se siente un precedente que acabe con la independencia de la República Turca de Chipre del Norte, hoy sólo reconocida por Ankara.

Miguel Ángel Moratinos habla con la secretaria de Estado estadounidense, Condoleezza Rice, ayer en Bruselas.
Miguel Ángel Moratinos habla con la secretaria de Estado estadounidense, Condoleezza Rice, ayer en Bruselas.EFE

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