Fallece a los 86 años Suharto, ex dictador de Indonesia
Gobernó el país con mano de hierro durante más de tres décadas
El ex dictador indonesio Suharto falleció ayer a los 86 años en el Hospital Petarmina de Yakarta, donde fue ingresado hace 23 días. El Gobierno de Indonesia ha decretado siete días de luto nacional.
El jefe del equipo presidencial de médicos, el doctor Marjo Subiandono, confirmó que la muerte de Suharto se produjo a las 13.10 (06.10 GMT). Padecía del corazón, los pulmones y los riñones. Según el parte médico, sufrió un fallo multiorgánico y entró en coma el pasado domingo.
Tras conocerse la noticia, el presidente indonesio, Susilo Bambang Yudhoyono, expresó sus condolencias y pidió a sus compatriotas que recen por Suharto, uno de los responsables de la brutal invasión de Timor Oriental (1975), que causó la muerte de unos 200.000 timorenses, según los grupos pro derechos humanos.
De acuerdo con la radio local, el cuerpo de Suharto será trasladado a su mansión de Cendana, en Yakarta central, donde se espera que esta noche realice una visita Yudhoyono, que ha suspendido su viaje a la isla de Bali, donde tenía previsto inaugurar el lunes una conferencia organizada por la ONU sobre corrupción.
Los mismos medios aseguran que Suharto será enterrado el lunes en el mausoleo que su familia posee en el cementerio de Astana Ciri Bangun, en Kalintan (Java Central), donde está enterrada su mujer.
Además, el secretario de Gabinete, Sudi Silalahi, anunció un luto nacional de siete días, a partir de ayer, en señal de respeto hacía el ex dictador, en cuya memoria permanecerá a media asta la bandera que ondea en el Palacio Presidencial.
A Suharto le acompañaron en sus últimas horas sus trece nietos y los seis hijos que tuvo con Hatinah, su esposa durante 49 años, y fallecida en 1996. Una de las últimas personas ajenas a la familia que pudo visitarle fue el viceprimer ministro camboyano Sok An, que el sábado permaneció media hora en la habitación de Suharto.
Uno de los más corruptos
El mandatario, quien en la última década ha sufrido embolias y hemorragias internas, encabezaba la lista de los dirigentes más corruptos de las últimas décadas del Banco Mundial y de la organización Transparencia Internacional. Se le acusaba de haber robado millones de dólares de las arcas del Estado después de abandonar el poder. Nunca se la ha juzgado en Indonesia por su avanzada edad y su delicado estado de salud.
El expresidente llegó al poder tras un fallido golpe de estado en 1965, atribuido oficialmente al Partido Comunista. La limpieza posterior a la intentona se saldó con la muerte de 500.000 personas. El ejército, además, fue acusado mientras estuvo bajo el mandato de Suharto, de violaciones a los derechos humanos en Aceh, Papúa, Timor Oriental y otros lugares.
