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Sarkozy advierte a los rebeldes chadianos de una posible intervención francesa

Los insurgentes se dicen dispuestos a un alto el fuego.- Miles de personas siguen huyendo hacia Camerún.- El gobierno clama la intervención de la comunidad internacional

Francia intervendrá militarmente en defensa del Gobierno de Chad si es necesario. El presidente francés, Nicolas Sarkozy, ha lanzado esta advertencia a los rebeldes chadianos que, con el apoyo de Sudán, intentan derribar por la fuerza el Gobierno de Idriss Déby. Ante la presión internacional y el fracaso de una ofensiva lanzada este fin de semana contra la capital, Yamena, los insurgentes -ex colaboradores de Déby que buscan ahora su salida del poder- se han mostrado dispuestos a un alto el fuego.

Tras la aprobación ayer por el Consejo de Seguridad de la ONU de una declaración de condena a la ofensiva rebelde, Sarkozy ha advertido a los rebeldes de que "si Francia tiene que hacer su deber, lo hará". La resolución abre la puerta a una posible intervención militar francesa en Chad. Los rebeldes acusan a Francia de haber intervenido ya en el conflicto con su fuerza aérea, pero París lo niega.

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Ahora, con la resolución en la mano, Sarkozy ha dicho que "el ejército francés no está en Chad para enfrentarse con las armas a nadie, pero ahora hay una decisión jurídica del Consejo de Seguridad tomada por unanimidad y si Chad es víctima de una agresión, Francia tendría los medios de oponerse a esta acción contraria a las reglas del derecho internacional". "Cada uno debe reflexionar bien y dejar al gobierno legítimo hacer su trabajo".

Las declaraciones de Sarkozy se unen a la presión internacional a los rebeldes, apoyados por Sudán. Ante la creciente presión, y en vista de que su ofensiva sobre Yamena no logró el objetivo de desalojar a Déby del poder, los rebeldes se han dicho hoy dispuestos a un alto el fuego. Un portavoz del grupo insurgente, Abderaman Koulamallah, ha declarado que, "conscientes del sufrimiento de la población y de acuerdo con las iniciativas de paz de nuestros países hermanos, Libia y Burkina Faso, las fuerzas de resistencia nacional aceptan un alto el fuego inmediato". Las declaraciones de Koulamallah han sido matizadas después por otro portavoz, Henchi Ordjo, que, en declaraciones a la agencia Reuters, ha condicionado esta tregua a la salida del presidente Déby.

Ambos han condenado la implicación de Francia en el conflicto. Según los guerrilleros, las tropas francesas destacadas en el país han bombardeado sus posiciones en la capital, provocando la retirada en varios frentes y matando decenas de civiles.

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Refugiados

Desde el pasado sábado, las tropas leales al presidente chadiano resistían la presión de los guerrilleros -ex miembros del círculo de Déby que cuentan con el respaldo de Sudán- por hacerse con el control de la capital del país, Yamena, donde la población se encuentra atrapada en medio de los combates. Fuentes de organizaciones humanitarias aseguran que en las calles hay 'decenas de cadáveres' mientras a los hospitales de la ciudad no han dejado de llegar heridos.

En este sentido, el ministro de Exteriores chadiano, Ahmat Allam-mi, ha advertido hoy de que, a menos de que la comunidad internacional intervenga de forma inmediata en la crisis que vive Chad, se producirá una "situación catastrófica" en Africa Central.

"Tendremos una situación dramática y catastrófica en toda la región", ha afirmado Allam-mi en una entrevista concedida a la agencia de la ONU IRIN. "Si Chad se desestabiliza, la catástrofe humanitaria en (la región sudanesa de) Darfur va a desbordarse a toda la región

de Africa Central".

"Chad necesita el apoyo de la comunidad internacional para

garantizar su soberanía, integridad territorial y para proteger a su población", ha subrayado el ministro.

Miles de personas huyeron ayer de Chad hacia Camerún para tratar de escapar de los enfrentamientos. La ONU ha alertado que el número de refugiados chadianos en el país vecino puede oscilar entre los 15.000 y los 20.000. La Cruz Roja, por su parte, asegura que los refugiados superan los 45.000.

Los funcionarios de unas 60 entidades de la ONU en Chad han sido evacuados, quedándose en el país solamente el personal imprescindible. En la actualidad más de 500.000 personas dependen en Chad de la ayuda humanitaria.

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