La sociedad civil impone en Túnez sus reivindicaciones

El Gobierno de transición se desmorona y la calle impone su agenda en Túnez. El siguiente paso de la revolución tunecina será la creación de una Asamblea Constituyente tal y como lo exigía un amplio colectivo de la sociedad civil autobautizado Consejo de Protección de la Revolución.

Este órgano lo forman decenas de asociaciones y colectivos profesionales, media docena de partidos políticos, muchos de ellos de nuevo cuño, y el poderoso sindicato Unión General de Trabajadores Tunecinos. Su objetivo es pilotar la transición.

Horas antes de la llegada a Túnez, hoy miércoles, del presidente español, José Luís Rodríguez Zapatero, el Ejecutivo tunecino se deshilachaba a pasos agigantados.

El Comité de Protección de la Revolución quiere pilotar la transición

A la dimisión, el domingo, del primer ministro, Mohamed Ghanuchi, se añadieron, en los dos primeros días de la semana, las renuncias de otros siete miembros del Gobierno, según la agencia de información tunecina TAP.

Entre los que anunciaron su salida figuran dos pesos pesados de la antigua oposición al régimen del derrocado presidente Zine el Abidine Ben Ali, del que se informó que estaba en coma en su exilio saudí. La noticia es falsa y obedece, probablemente, a una intoxicación para abortar de antemano cualquier intento de obtener su extradición, según fuentes diplomáticas.

Ahmed Nejib Chebbi, prestigioso líder del Partido Democrático Progresista, dimitió ayer como ministro de Desarrollo Regional. Subrayó, en una conferencia de prensa, la "situación de inseguridad y disturbios sociales" que prevalece en el país y advirtió "del riesgo de golpe de Estado".

Nejib reveló también que durante su última conversación con el nuevo primer ministro, Beji Caid Sebsi, de 84 años, nombrado el domingo, éste le informó de que "se doblegará" a las exigencias del Consejo de Protección de la Revolución.

El otro peso pesado que dimitió ayer del Gobierno es Ahmed Ibrahim, que ocupaba la cartera de Educación Superior y que encabeza Ettajdid, el antiguo partido comunista.

El Comité de Protección de la Revolución no se conforma con la puesta en pie de una Asamblea Constituyente. Reivindica que se disuelva el "agonizante" Gobierno de transición, que se designe a un nuevo primer ministro por consenso, que el próximo Ejecutivo esté formado por personas sin vínculos con el anterior régimen que adquieran, además, el compromiso de no presentarse a las elecciones legislativas ni presidenciales.

El Ministerio del Interior de Túnez legalizó ayer, treinta años después de su fundación, al partido islamista En Nahda (Renacimiento). Los tribunales tunecinos ordenaron, por su parte, ayer la excarcelación de miles de presos en aplicación del decreto-ley de amnistía general.