_
_
_
_
_
Entrevista:MARY ROBINSON | Ex presidenta de Irlanda | Conferencia del Club de Madrid

"La escasez de mujeres en el poder en la Unión Europea es un déficit democrático"

Juan Carlos Sanz

Cuando Mary Robinson (Ballina, condado de Mayo, 1944) propuso hace 40 años adoptar las primeras medidas de planificación familiar en el Parlamento de la católica Irlanda se quedó completamente sola. Pero al dejar la presidencia de la República, que ocupó entre 1990 y 1997, destacaba a la cabeza de todos los dirigentes políticos de su país, con más del 90% de aprobación popular en los sondeos.

"Algunas de mis propuestas fueron muy controvertidas en su momento, pero en Irlanda han caído ya muchos muros", reconoce Robinson, vicepresidenta del Club de Madrid. "Estoy orgullosa de haber tenido la oportunidad de representar a una Irlanda que, tras la lucha histórica por la libertad y por mantener su identidad, ocupa hoy un papel significativo entre los países europeos".

"No soy candidata a presidir la UE; mi misión ahora es el cambio climático"
Más información
Política en tiempos de crisis

La antigua mandataria resalta en que la diáspora irlandesa hacia el otro lado del Átlántico fue fruto de las hambrunas que azotaron la isla en el siglo XIX, y que el reciente éxito de la economía se produjo tras la incorporación de Irlanda a la UE. "Como ex presidenta, no debería entrometerme en los asuntos de mi país, pero está claro que la especulación inmobiliaria nos ha golpeado con dureza, y que algunos bancos, que formaban parte del mismo problema, han tenido que ser regulados", admite desde la distancia de su actual responsabilidad como directora de una ONG internacional en Nueva York. "Veo que hay un gran malestar en Irlanda, pero no debemos olvidar que fuimos un país pobre que tuvo que luchar duro para progresar. Precisamente, eso mismo es lo que tenemos que volver a hacer ahora. Pero incluso en los malos tiempos hay que seguir cumpliendo nuestro compromiso de ayudar a los países en desarrollo".

El presidente del Parlamento Europeo, el polaco Jerzy Buzek, ha echado en cara a los líderes de la UE la escasa presencia de mujeres en las instituciones ?ocho comisarias europeas frente a 19 comisarios? y les ha urgido a nombrar a una mujer para la futura presidencia de la Unión. "Estoy completamente de acuerdo con Buzek", responde sin vacilar Robinson. "Es decepcionante ver como se desarrolla el proyecto europeo, sin paridad. Me temo que seguirá habiendo pocas mujeres en la Comisión. Europa necesita tener más mujeres en el poder para superar un déficit democrático".

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Para la ex presidenta irlandesa, "hay varias políticas europeas en condiciones de presidir la UE", aunque prefiere no citar a ninguna en concreto. "Yo no soy candidata", afirma de forma tajante, "estoy absolutamente comprometida con otra misión: el impacto del cambio climático en los países más pobres, los que no figuran en el programa de la cumbre de Copenhague porque apenas contaminan, a pesar de que se están viendo afectados como todos por el calentamiento global. En África, por ejemplo, el cambio del clima está siendo devastador".

Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos entre 1997 y 2002, Robinson lamenta que los equilibrios de poder en el seno de Naciones Unidas propiciarán "presiones inaceptables de algunos países". Como presidenta, visitó Ruanda en 1994, poco después del genocidio. Regreso dos veces más para llevar la ayuda de Irlanda a la región de los Grandes Lagos.

? ¿Habrá una Irlanda unida, algún día?

? No creo que eso sea tan importante ahora. Excepto en la moneda, no hay ninguna diferencia al pasar del sur al norte. Los deportistas, los profesionales, los artistas, se ven constantemente, trabajan juntos. Y ya se hace una promoción del turismo conjunta. Lo importante es que los pueblos estén unidos.

Mary Robinson.
Mary Robinson.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Juan Carlos Sanz
Es el corresponsal para el Magreb. Antes lo fue en Jerusalén durante siete años y, previamente, ejerció como jefe de Internacional. En 20 años como enviado de EL PAÍS ha cubierto conflictos en los Balcanes, Irak y Turquía, entre otros destinos. Es licenciado en Derecho por la Universidad de Zaragoza y máster en Periodismo por la Autónoma de Madrid.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_