Una espía rusa pone en jaque la seguridad de los Comunes
Los protocolos de seguridad de la Cámara de los Comunes han quedado seriamente en entredicho después de que una joven rusa de 25 años, que desde hace tres trabaja como asistente de un diputado liberal, haya recibido una orden de expulsión a instancias del MI5. La deportación de Ekaterina Zatuliveter, que fue detenida el jueves y niega las acusaciones de espiar para Rusia, está pendiente de que se resuelva su recurso.
El caso es especialmente delicado para el citado diputado liberaldemócrata, Mike Hancock, miembro de la Comisión de Defensa de los Comunes y vicepresidente del grupo informal de diputados Amigos de Rusia. Su larga serie de preguntas delicadas al Gobierno sobre algunos de los aspectos de la defensa británica tampoco son una buena noticia para él. En los últimos meses, Hancock ha presentado numerosas preguntas que ahora llaman la atención, como dónde están atracados los submarinos, la publicación del inventario de los arsenales nucleares, qué progresos se están dando en el Programa Hydrus -parte vital del programa de armamento nuclear cuyos detalles son secretos-, cuándo se llevará a cabo la revisión del diseño de las cabezas nucleares del sistema de disuasión nuclear Trident o también acerca de la presencia militar en Gibraltar.
A pesar de ello, no hay ahora mismo sospechas de que Hancock esté involucrado en actividades de espionaje. Los medios británicos dan a entender que el diputado liberaldemócrata, de 64 años y con larga fama de mujeriego, ha podido caer en una trampa dada su conocida inclinación por las mujeres jóvenes, atractivas y con estudios.
Al colegio con chófer
Ese es el perfil de Zatuliveter, una joven de buena familia del sur de Rusia que de niña iba a la escuela con chófer y que estuvo a un paso de conseguir empleo en una importante organización de defensa británica. Katia, que estaba entre los tres candidatos finales, estaba tan segura de que iba a obtener el empleo que Hancock publicó un anuncio para encontrar sustituto. Pero, según la prensa inglesa, el MI5 alertó a esa organización de sus sospechas sobre la rusa.
