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Las inundaciones en Indonesia dejan a 340.000 personas sin hogar

El temor a las epidemias dispara la alarma en el país asiático.- La población culpa de la situación de caos a las autoridades de Yakarta

EFE

Una gran parte de Yakarta, la capital de Indonesia, sigue hoy bajo las aguas por las peores inundaciones de su historia reciente, que ya han causado 29 muertos y han dejado sin hogar a 340.000 personas. Las precipitaciones han causado desde el jueves el desbordamiento de varios ríos y provocado el despliegue de un amplio dispositivo para rescatar a los damnificados. Se pronostican más lluvias torrenciales para los próximos días.

Muchas zonas de la capital -entre un 50% y un 70%, según cálculos de las autoridades- continúan sumergidas bajo el agua. Un dispositivo compuesto por 12.600 personas trata de hacer llegar a los afectados alimentos y medicamentos. La mayoría de ellos residen en Yakarta y en localidades próximas a la capital, como Tanggerang y Bekasi. Los damnificados se acumulan en escuelas, mezquitas y otras instalaciones de las zonas altas de la urbe que se han salvado del diluvio.

La distribución de ayuda se realiza en helicópteros y en balsas neumáticas por zonas en donde el nivel del agua llegó a superar los tres metros de altura. El responsable en las operaciones de rescate y salvamento, Sihar Simanjuntak, ha advertido de que el agua puede afectar seriamente a última hora de hoy a la parte meridional de esta ciudad de 12 millones de habitantes. "Esperamos que los residentes permanezcan alerta porque el agua puede aumentar de nuevo y muy rápido", ha indicado.

Alto riesgo de epidemias

Mientras, existen fuertes temores de se extiendan enfermedades entre la población, sin acceso a agua potable para beber. "Muchas personas han caído enfermas, pero no tenemos centros sanitarios en nuestras áreas", ha declarado una mujer que reside en el barrio de Jalambar a una emisora de radio local. La ministra indonesia de Salud, Siti Fadillah Supari, ha indicado que los servicios médicos están preparados para atender las apariciones de brotes de diarrea severa, cólera, fiebres tifoideas y sarampión. Por el momento se han atendido a más de 50.000 personas. "Tenemos que estar alerta ante el riesgo de que salten brotes de enfermedades como las fiebres tifoideas, que se trasmiten a través de las ratas y de infecciones respiratorias", ha apuntado por su parte el ministro del Interior, Siti Fadillah Supari, quien ha añadido que, al menos, "no hay riesgos de disentería".

”Un fenómeno natural”

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Una de las muchas personas afectadas es Augustina Rusli, una mujer que ha permanecido durante cinco días en la terraza de su domicilio junto a su hijo de diez meses esperando auxilio. Tras ser rescatada ha denunciado la "terrible" actuación del Gobierno. Y es que las críticas al Gobierno por su pobre respuesta frente a la catástrofe han sido abrumadoras. El gobernador de Yakarta ha sido blanco de todas las críticas por no asumir responsabilidades y por quitarle importancia a la tragedia indicando que se trata de un "fenómeno natural" que ocurre cada poco. El ministro indonesio de Medioambiente, Racmat Witoelar, por su parte, ha atribuido la catástrofe a una "pobre" planificación urbanística.

Las explicaciones de las autoridades no han convencido a la opinión pública. Así, el periódico The Jakarta Post abre su edición con un artículo titulado "El desastre de las inundaciones es el legado inaceptable de Sutiyoso". "Nos guste o no, las grandes inundaciones que han anegado Yakarta y han puesto a la ciudad al borde de la parálisis, así como las miserias inenarrables de los últimos tres días, será el gran legado de sus diez años de reinado (de Sutiyoso", escribe el periodista. "Si alguna cabeza debe rodar por el mal manejo del desastre es la Sutiyoso y sólo la suya", concluye el autor.

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