El jefe de la Cámara Alta del parlamento ruso visita hoy España

Serguéi Mirónov, el jefe del Consejo de la Federación de Rusia (Cámara Alta o Senado), cree que "en los primeros meses" de 2010, es decir durante la presidencia española de la Unión Europea, se puede llegar a firmar el nuevo documento marco de la relación entre Rusia y la UE para sustituir al que expiró en 2007 y que se prorroga automáticamente desde entonces.

En una entrevista en vísperas de su visita oficial a España, que tiene lugar el 13 de octubre, Mirónov, un oriundo de San Petersburgo de 56 años, se mostró partidario de acelerar el debate sobre la nueva arquitectura de seguridad europea para llegar a un tratado, en el que se deslinden también los conceptos de autodeterminación, integridad territorial y fronteras.

El conflicto en Georgia "demostró que los mecanismos de seguridad europea no funcionaron", dice. "Se necesita algún nuevo acuerdo que tuviera en cuenta las contradicciones entre dos principios del derecho internacional, la autodeterminación y la integridad territorial". "Hay que eliminar esa contradicción y fijar qué entendemos por integridad territorial, por derecho a la autodeterminación y por fronteras, porque de lo contrario surgirán nuevas y nuevas colisiones", advierte.

El presidente ruso, Dmitri Medvédev, ha presentado su esbozo para una nueva arquitectura de seguridad y sus iniciativas "no niegan lo que se ha hecho en el marco de la OSCE, sino que plantean integrar todo lo elaborado y más". Además, Rusia y Europa deben profundizar en la idea de la interdependencia energética. "Hay que concertar normas que tengan en cuenta los intereses de productores, países de tránsito y consumidores", afirma. Una vez comenzado a explotar un yacimiento de gas, éste fluye de él de forma permanente y "si se cierra la espita, un tercio del combustible no se podrá extraer ya, por eso Rusia tiene una dependencia directa de los contratos de suministro de gas a Europa."

El debate sobre la Historia y sobre Stalin es actual Rusia. "Hay muchos que ni siquiera son comunistas que desean blanquear la figura de Stalin y perfilarlo como un dirigente sabio que hizo la industrialización y la colectivización sin que le temblara la mano, y que ganó la guerra", dice. "Resulta peligroso", advierte, "tratar de imponer" esta imagen de Stalin, sobre todo "entre la juventud que no tiene las ideas claras". Opina Mirónov que el mensaje neoestalinista no viene ni del presidente Medvédev ni del primer ministro, Vladímir Putin, que tienen una posición "claramente articulada", ni tampoco de las instituciones del Estado. Sin embargo, "si se preguntara anónimamente a los que trabajan en órganos de poder regionales y federales, encontraríamos a bastante gente que proponen a Stalin como un modelo de comportamiento, ya que sobre el telón de fondo del desorden, la corrupción y los sobornos, a muchos les aparece ese deseo peligroso". "Los principios democráticos deben imperar", señala.

"No hay que avergonzarse de la Historia, que es la que es y no tendremos otra, pero no hay que pintarlo todo con un mismo color", señala y recuerda la impresión que le produjeron las listas de fusilamientos practicados por el régimen estalinista en los años treinta, publicadas en época de la "perestroika", en la segunda mitad de los ochenta, cuando Mirónov trabajaba de geólogo en Mongolia. "Era una represión masiva en la que asesinaron a gente muy sencilla, y de eso hay que hablar"dice. En la Segunda Guerra Mundial, precisa los soviéticos que luchaban por su patria contra el invasor lograron la victoria, "en muchos casos a pesar de Stalin y no gracias a él".

El Consejo de la Federación, inicialmente formado por senadores elegidos, está integrado hoy por miembros designados. Mirónov insiste en que es partidario de la elección de los senadores, pero, de momento, se da por satisfecho con una ley (iniciada por Medvédev), que entrará en vigor 2011 y que contempla que los nuevos senadores sean diputados electos en parlamentos regionales o municipales. De ese modo, dice, se realiza el principio de la elección aunque no sea directa. "Es una innovación positiva, un paso en la dirección correcta". "Dentro de tres a cinco años se puede intentar añadir algo más", dice."Hay muchos senadores que representan muy bien regiones donde no habían vivido antes de que los enviaran ahí y las regiones no tienen quejas sobre ellos", afirma.

El 11 de octubre se celebraron elecciones municipales en la mayoría del territorio ruso y, como se esperaba, Rusia Unida (RU), el partido del gobierno, se proclamó vencedora. Rusia Justa, el partido que dirige Mirónov, creado como una fuerza de tendencia socialdemócrata y vocación de alternativa a RU, ni siquiera se clasificó en segundo lugar. Mirónov distingue entre RU de su líder Vladímir Putin, que sin embargo no es afiliado del partido. Putin, dice, "obliga a los miembros de RU a que se batan de forma honesta y no tengan miedo al debate". En cuanto a Medvédev, éste "aspira" a mantenerse equidistante de los diferentes partidos, pero en algunas regiones han aparecido propaganda electoral de RU con su foto. "Por lo que sé el presidente ha dado permiso", dice. Y añade: "En las próximas elecciones en marzo le pediré al presidente que nos deje utilizar su imagen en los comicios. Como es un hombre sin partido seguramente no se negará", afirma. Medvédev "sigue las tradiciones de Putin" y mantiene "encuentros regulares con los líderes de las fuerzas políticas del parlamento". Entre los temas en los que todos están de acuerdo está la necesidad de luchar contra el "alcoholismo de la población".