El líder liberal de los jueces del Supremo de EE UU se retira

A 10 días para cumplir 90 años, el juez del Tribunal Supremo de Estados Unidos John Paul Stevens anunció que se marcha. Stevens no sólo es el miembro de más edad del tribunal, sino también el líder del ala liberal. Su partida pone por segunda vez al presidente Barack Obama ante la necesidad de llenar una vacante en la máxima corte. La primera resultó en la designación de la juez Sonia Sotomayor, la primera mujer latina en llegar al puesto.

Desde hace meses circulaban rumores sobre la retirada de Stevens debido a su avanzada edad. Su última aportación a un caso de envergadura fue su voto en contra de la decisión de la mayoría conservadora del Tribunal Supremo que eliminaba los límites a la financiación por parte de empresas privadas de las campañas políticas en el país.

Nombrado para el cargo en 1975 por el presidente republicano Gerald Ford -que sucedió en el cargo a Richard Nixon-, Stevens se ha alineado casi siempre con el ala más liberal del tribunal en los casos más polémicos, como los que afectaban al aborto, los derechos civiles o las relaciones entre la Iglesia y el Estado.

Stevens comunicó a Obama su decisión en una carta de un párrafo en la que le saluda diciendo: "Mi querido señor presidente". Obama fue informado de la marcha del juez a bordo del Air Force One cuando regresaba de Praga, donde firmó el mayor acuerdo de desarme nuclear en 20 años. Recién aterrizado, el presidente compareció unos breves momentos ante la prensa en la Casa Blanca para definir a Stevens como un "guardián imparcial" de la ley y aseguró que actuará con rapidez en la búsqueda de un sucesor.

El juez, el último veterano de la II Guerra Mundial que quedaba en la Corte, anunció que se retirará al comenzar el receso de verano, y expresó su esperanza de que su sucesor sea confirmado "con bastante anticipación al comienzo del próximo curso judicial", en octubre. Los demócratas se imponen como fecha límite para buscar un sustituto los comicios de mitad de mandato de noviembre, ante la posibilidad de perder el control del Senado.

La retirada del juez no cambiará en principio la composición ideológica de la Corte. Los nombramientos para el Supremo son clave porque los jueces ejercen el cargo hasta su muerte o jubilación. Los principales candidatos a ocupar el puesto de Stevens son la procuradora general Elena Kagan, de 49 años, y los jueces federales de apelación Merrick Garland, de 57, y Diane Wood, de 59.