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Entrevista:IKUO TOWHATA | Experto en terremotos de la Universidad de Tokio | Catástrofe en Japón

"Ante el tsunami, edificios más altos"

Indonesia, Irán, Pakistán, China. Ikuo Towhata, de 56 años, especialista en ingeniería geotécnica y experto en terremotos de la Universidad de Tokio, ha visitado todos estos países para estudiar los mecanismos de destrucción y el efecto sobre el suelo de los temblores de tierra. Nacido en Kobe, que sufrió en 1995 un terremoto que provocó unos 5.000 muertos, estudia ahora una catástrofe mucho mayor. Towhata asegura que las placas tectónicas del Pacífico y de Filipinas están moviéndose bajo Japón, lo que hace presagiar otro gran terremoto en la zona de Tokio o más al sur antes de 30 años.

Pregunta. ¿Qué valoración hace del terremoto y el tsunami del 11 de marzo?

Respuesta. El área dañada es enorme, más de 500 kilómetros de costa. Los edificios aguantaron muy bien el terremoto, pero el terreno sufrió grandes destrozos. Terraplenes, autopistas y líneas de ferrocarril resultaron destruidos. Cinco o seis millones de personas se vieron afectadas. Un factor clave fue el tsunami. La región de Sendai ha sido atacada en el pasado por tsunamis así y contaba con muros de contención. Pero los más altos tenían 10 metros de altura. La gente pensaba que era suficiente y no fue así.

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P. ¿Qué altura tuvo el tsunami?

R. Llegó a 15, 20 e incluso 30 metros en algunos lugares. Ha sido una situación extrema. Cuando la altura de un tsunami es mayor que el valor de diseño de los muros, todo queda destruido.

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P. Desde el temblor se han producido centenares de réplicas, incluso de magnitud superior a 7. ¿Por qué?

R. Un terremoto de intensidad 9 no implica que se produzca una ruptura completa de la falla. Algunas partes sobreviven, y ahora se están rompiendo una a una.

P. Japón está bien preparado para soportar terremotos, pero no tsunamis, según demuestra lo ocurrido. ¿Qué pasó?

R. La altura de los tsunamis ha sido infravalorada. Algunos edificios aguantaron muy bien el ataque del agua. Mucha gente subió a sus azoteas y sobrevivió. Pero no todo el mundo tuvo esta oportunidad.

P. ¿Qué hacer contra los tsunamis?

R. No podemos parar los tsunamis, construir muros a lo largo de cientos de kilómetros de costa. La clave es el sistema de aviso, la evacuación. Es preciso contar con edificios altos a los que la gente pueda subir una vez dada una alerta de tsunami. Edificios de 20 metros parece ser una altura razonable.

P. ¿Qué consecuencias debe sacar Japón de esta catástrofe?

R. Deberíamos pensar cómo gestionar el sistema en su conjunto para reducir el daño. Deberíamos cambiar el modo de pensar, porque incluso si un suceso terrible como este solo ocurre cada mil años en el área de Tohoku (noreste de Japón), podría producirse un gran sismo en otras partes de Japón, quizás antes de 30 años, en la zona de Tokio y la costa del Pacífico, Nagoya y la isla Shikoku.

P. La previsión de un gran terremoto en la zona de Tokio antes de 30 años es anterior a este sismo. ¿El terremoto del 11 de marzo modifica esta previsión?

R. No es posible saberlo.

P. Japón tiene muchas centrales nucleares junto a la costa. ¿Qué hacer ahora?

R. Esto va a ser un tema muy controvertido a partir de ahora. La seguridad es un tema clave, y tras lo ocurrido nadie confía en Tokyo Electric Power [Tepco, la empresa que opera la planta atómica de Fukushima]. La gente comienza a decir que no quiere centrales nucleares, pero ¿de dónde obtener la energía eléctrica? Va a producirse una gran controversia política.

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