_
_
_
_
_

Un juego en el que hay que matar políticos corruptos triunfa en China

En el año 2000, altos funcionarios y oficiales del Ejército fueron condenados a prisión por un caso de contrabando y malversación de fondos públicos

Un juego online en el que la principal misión es acabar con políticos corruptos de la historia de China está levantando pasiones entre los internautas de una ciudad en la que hace unos años se produjo uno de esos escándalos de corrupción, según informa la prensa local.

En la ciudad de Ningbo (noreste de China), donde hace ocho años se produjo un escándalo que involucró a altos oficiales del Ejército chino, el juego lleva instalado sólo una semana y ya ha sido jugado por más de 7.000 personas en los cibercafés, según relató el diario 'South China Morning Post'.

Aunque ambientado en décadas pasadas (desde la dinastía Qing, última de China, hasta la actualidad), el juego busca concienciar a los jóvenes sobre la importancia de luchar contra la corrupción actual.

"A través del juego, (los jóvenes) serán más positivos y valientes en la lucha contra la corrupción en el mundo real", destaca Hua Tong, diseñador del juego, pensado originalmente para los estudiantes de Ningbo pero que dado su éxito podría llevarse al resto del país.

El juego está basado en lugares reales de Ningbo, y los usuarios usan diversos trucos para acabar con los políticos corruptos, incluyendo el asesinato con toda clase de armas sofisticadas.

En el año 2000, altos funcionarios y oficiales del Ejército de Liberación Popular (ELP) fueron condenados a prisión por un caso de contrabando y malversación de fondos públicos en Ningbo.

Wei Baoguo, responsable de las tropas fronterizas del Ejército chino en esa ciudad y en la provincia (Zhejiang), fue sentenciado a 20 años de cárcel por delitos como la compra de crudo sin pagar impuestos a través de ese puerto, uno de los principales del país.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_