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Reportaje:

Arte y cruasanes

Las galerías madrileñas abren la temporada con una inauguración conjunta hoy y desayunos para sus visitantes el sábado por la mañana

Quienes el pasado sábado echaron de menos más arte en La Noche en Blanco, podrán resarcirse este fin de semana. Las galerías madrileñas inician hoy un largo fin de semana de puertas abiertas para inaugurar la temporada. Como en los últimos años, las 46 galerías que forman parte de Artemadrid no cerrarán hasta las 22.00. Pero este año hay más novedades para dar la bienvenida al otoño artístico. Mañana, el Museo Reina Sofía albergará (a las 19.00) una mesa redonda con grandes coleccionistas y el sábado, los que se perdieron las inauguraciones podrán desayunar en las galerías a partir de las 10.00. "Es una magnífica iniciativa para que la gente pierda el miedo a entrar en una galería", dice Nerea Fernández, de Nieves Fernández. Para Isabel Mignoni, de Elvira González, es también una ocasión para que la gente de fuera compruebe que "Madrid no es solo Arco, sino que hay temporada todo el año".

Domina la pintura, abundan las instalaciones y, algo menos, la fotografía

Aunque las perspectivas para el sector son inciertas -como lo son para el resto de la economía-, las galerías encaran el curso con unos ambiciosos programas expositivos. Estas son las claves de una oferta en la que predomina la pintura, aunque abundan las instalaciones y, algo menos, la fotografía.

- La seguridad de los clásicos. En la programación del inicio de temporada no faltan los grandes nombres. Sol Lewitt abrirá el curso en Juana de Aiz-puru con Wall Drawings, la pintura de Juan Navarro Baldeweg colgará de las paredes de la galería Marlborough, mientras Jordi Teixidor, uno de los grandes de la abstracción española, mostrará su nueva obra en Nieves Fernández. Helga de Alvear cuenta con la portuguesa Helena Almeida, mientras Elvira González ha pensado en su clientela de amantes del minimalismo y posminimalismo y ha elegido al artista coreano-japonés Lee Ufan. Guillermo de Osma aportará vientos del siglo XX con el surrealista Victor Brauner.

- En plena madurez. Otros espacios apuestan por artistas maduros, respaldados por una trayectoria internacional. La galería Distrito 4 cuenta con el brasileño José Damasceno, que en 2008 ya invadió diversos espacios del Museo Reina Sofía con sus instalaciones. La galería Heinrich Ehrhardt presenta por primera vez en España a Stefan Müller y su obra, que la crítica ha calificado de "pintura punk". Oliva Arauna, fiel a su compromiso con la fotografía, estrena temporada con las series del sudafricano Zwelethu Mthethwa Brick workers & Contemporary gladiators, un retrato crítico de la realidad de los niños de los guetos las y mujeres trabajadoras.

- Jóvenes que despegan. Las galerías madrileñas no se olvidan de los más jóvenes. José Robles busca arte emergente, de última generación, con algún reconocimiento en forma de becas o premios: "Es una apuesta arriesgada porque se trata de ir seleccionando artistas que se hayan hecho conocidos en el circuito institucional y pensar si pueden tener interés en un circuito comercial", dice el galerista. ¿Un ejemplo? Tamara Arroyo, protagonista de la exposición que abre la temporada. Guillermo Romero, de Parra & Romero, elige artistas -españoles y no españo-les- en la frontera de lo conceptual y lo minimalista, como el suizo Philippe Decrauzat.

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- Promesas hechas realidad. A veces las expectativas se hacen realidad. Es el caso de varios de los artistas de la galería Maisterra Valbuena -como Karmelo Bermejo, único español presente, junto con Cristina Lucas, en la Bienal de Liverpool-. Para este inicio de temporada ha elegido a la estadounidense Helen Levitt: "Nuestros coleccionistas son también un poco mecenas, porque comprar obra de nuestros artistas significa a veces pagarles el alquiler de un mes", señala Pedro Maisterra.

Instalación <i>Le bain animique,</i> del artista brasileño José Damasceno, en Distrito 4.
Instalación Le bain animique, del artista brasileño José Damasceno, en Distrito 4.

El sector pide

Las galerías madrileñas mantienen varios frentes reivindicativos abiertos con las autoridades.

- Que se aplique a sus transacciones un IVA reducido del 7%, el que se aplica a las industrias culturales, y no el 18%

del régimen general.

- En este momento de crisis y restricciones publicitarias, las galerías piden a las instituciones públicas que las compras de arte que deban hacer se canalicen a través de galerías españolas.

- Perdida la batalla en contra del derecho de participación -derecho de autor que se genera en las reventas

de una obra de arte, transposición de una directiva europea que el Parlamento aprobó hace dos años-, los galeristas piden que se aplique sobre el beneficio de la obra, y no sobre el importe de la venta.

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