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EGO de Cibeles amplía su oferta de diseño actual

16 creadores emergentes enseñan sus colecciones en tres días llenos de futuro

El EGO de la Pasarela Cibeles llega a su quinta edición del 31 de enero al 2 de febrero en la que es ya su sede estable: la sala de exposiciones Alcalá 31 de la Comunidad de Madrid (el antiguo edificio monumental de un banco en estilo art-decó), con una notable ampliación que comprende la incorporación de hasta 16 nombres y sellos de nueva hornada.

Una excepción en cuanto a conocimiento del mercado y trayectoria es La Casita de Wendy, firma ya conocida que presentará, sin embargo, una novedad en toda regla: su segunda línea. Ideado como una plataforma de experimentación y mezcla de tendencias y maneras.

El EGO es una opción contemporánea a los salones de moda convencionales
La 'cantera' de Cibeles incorpora tecnología, electrónica y nuevos materiales

El EGO dibuja una alternativa contemporánea y dinámica a los salones convencionales. Tecnología, nuevos materiales, electrónica, citas virtuales y otros hallazgos contemporáneos, se unen en una expresividad sin límites de edad o de filosofía vital.

Leonor Pérez Pita, directora de la Pasarela Cibeles, ha dicho a este periódico: "Nuestra apuesta por los diseñadores del mañana se amplía por dos razones fundamentales: hasta ahora, El EGO ha sido un éxito real de público, crítica y reacción entre los profesionales punteros del sector; por otro, es un deber de Cibeles pensar en el futuro de la moda española en un sentido amplio y global, en un relevo como parte de esa dialéctica y en encontrar la manera de canalizar en la práctica las carreras de los nuevos talentos, que es evidente que los tenemos". Diseñadores de todas partes de la geografía española y residentes en varias capitales importantes, sobre todo Madrid y Barcelona; una notable y presente dosis de riesgo junto a criterios claros de la necesidad de la implantación comercial y una consolidación que se verifica en la exigencia de calidad y madurez de los participantes, son algunas de las características que van saliendo mejor con cada EGO.

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El próximo día 31 es el primer encuentro con una lista de ocho diseñadores: Alba Blanco, Menchu Mora, Amai Rodríguez, Carocora, Lorena Rodríguez, Joan Fábregas, Seruei Povaguin y La Casita de Wendi. Povaguin es un caso específico de integración. Oriundo de Klintsi (Rusia), siendo un adolescente se trasladó al norte de España y posteriormente a Barcelona para cursar estudios de diseño; se graduó en la Escuela Superior de Diseño (ESDI) de Sabadell y luego por la Universidad de Southhampton. Su despegue fue triunfal: con su primera colección, titulada I love Spain, ganó el premio Pure White en Moda FAD de 2002. Su proyecto de fin de carrera, inspirado en el baile flamenco se ha visto en varios sitios de Europa. Se reconoce en todo su trabajo influenciado por el movimiento y la danza y su pujanza le ha llevado ya dos veces también al salón de las novias de Barcelona. La expectación creada por el ruso está más que justificada.

El tándem de La Casita de Wendy está compuesto por Inés Aguilar de 31 años, e Iván Martínez de 35. Su segunda línea estrena colección en este EGO con el apelativo de Happy. Ellos parten de una sólida formación que les lleva de la arquitectura a la Filosofía hasta llegar empíricamente a un diseño marcado ya por un fuerte estilo personal donde la inspiración, según ellos mismos, está "en la música, los cuentos, la magia y su herramienta: la imaginación". Quizás son estos presupuestos los que han llevado a la cantante islandesa Björk a vestir Casita de Wendy en múltiples ocasiones, ese gusto por lo aparentemente ingenuo que en realidad revela una depuración estética.

La segunda cita, el 1 de febrero, cuenta con María Escoté, Gemma Degara, Antiatoms, 36º, Ekaits Arruti, Roberto Piqueras, Beachcouture y Krizia Robustella. Krizia (Amsterdam, 1984) vive desde su infancia en Barcelona y ya participó en las dos ediciones anteriores de El EGO en febrero y septiembre de 2007. Ekaitz Arruti partió a Madrid desde su Irún natal para estudiar la diplomatura de Moda en el Istituto Europeo di Design; actualmente alterna el desarrollo personal de sus colecciones con el trabajo de asistente de diseño en el equipo de Carmen March. En EGA se verá su segundo intento formal de colección como tal.

La última jornada de El EGO, el día 2 de febrero, tendrá como actividad central un showroom gigante y abierto al público que al mismo tiempo es mercado. Es decir, y en palabras de Andrés Aberasturi, gestor de este salón y comisario: "Todos los diseñadores que participan, más una selección hasta llegar a 60, pueden este tercer día mostrar sus colecciones directamente y de paso venderlas a precios muy asequibles. Ya hicimos antes esta experiencia y el resultado es satisfactorio, de contacto directo entre diseñador y público".

Y como colofón, conciertos a cargo de Jet Lag, Nacho Vegas y Christina Rosenvinge, personalidades musicales que de alguna manera se ven relacionadas con la moda y sus meandros. El EGO cuenta ya con patrocinios estables como Mazda, L'Oreal Paris y V&T.

Aberasturi justificó con humor por qué se presentaba esta vez El EGO de Pasarela Cibeles en las instalaciones deportivas del club Canoe, al borde de una piscina donde no cesaba su actividad cotidiana y marcial de bañistas: "No es baladí escoger este sitio, nuestra imagen va por ahí también. De hecho, la piscina es una pasarela en sí misma, con la ceremonia del bañador en medio, entre otras connotaciones al mundo de la moda y la exhibición personal".

Esbozo de uno de los participantes en el EGO de la Pasarela Cibeles.
Esbozo de uno de los participantes en el EGO de la Pasarela Cibeles.

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