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Educación autorizará a los colegios a aumentar el número de alumnos por aula

Padres y sindicatos reclaman más clases en lugar de masificar las existentes

El consejero de Educación, Luis Peral (PP), asegura que permitirá incrementar el número de alumnos por aula de los centros escolares que lo soliciten y que tengan más peticiones que plazas. Peral reconoció que esta medida "es habitual desde hace años" y se hace para "primar el derecho de elección de centro de los padres". Las asociaciones de padres y sindicatos creen que esta medida atenta contra el acuerdo de Calidad de la Enseñanza, en el que se firmó el compromiso de disminuir el número de alumnos por aula. Ambos colectivos pidieron ayer más aulas, en lugar de masificar las que hay.

"Aquellos colegios que pidan un aumento de ratio [alumnos por unidad didáctica] se les concederá. Así haremos prevalecer el derecho de que los padres elijan el centro escolar que deseen para sus hijos", señala Peral, quien explicaba así que el curso próximo habrá más estudiantes por aula en los centros escolares donde haya más solicitudes.

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Según Peral, los colegios que más peticiones tienen que rechazar son los concertados (parcialmente subvencionados con fondos públicos), aunque es también un problema que afecta a los públicos. El año pasado, 5.000 padres que pidieron colegio concertado en primera opción no pudieron llevar a sus hijos al centro deseado. "Hubo 14.000 solicitudes y sólo se pudo complacer a 9.000 familias que consiguieron su opción preferente. Por eso no importa que, siempre según la legalidad, un aula aumente en dos o tres niños más si así salen ganando los padres", aseguró Peral.

Las ratios máximas en los centros educativos están reguladas por el real decreto de requisitos mínimos del año 2003. En él se establece que, como máximo, podrá haber 25 alumnos por aula en primaria, 30 en secundaria y 35 en bachillerato. Peral aseguró que la norma debe completarse con el reglamento de admisión de la Comunidad. "Esta normativa permite incrementar la ratio y adoptar medidas especiales en situaciones excepcionales", agregó. Amparándose en esta legislación, el incremento de ratio que podrían solicitar los centros escolares supondría pasar de los 25 estudiantes en primaria a 28, y de 30 en secundaria a 33.Los sindicatos criticaron ayer el anuncio de Educación. Según Francisco García, de CC OO, no existe un marco legal que permita el aumento del número de alumnos por aula aunque lo solicite el centro. "Estamos estudiando impugnar la medida. No puede aumentar la ratio máxima porque no hay decreto ni ley que se lo permita", asegura García, que cree que superar lo establecido por un decreto "atenta contra la legalidad".

Sin embargo, el consejero Peral aseguró que cuatro sentencias del otoño pasado del Tribunal Superior de Justicia de Madrid le dan la razón. "No estamos haciendo nada nuevo. Se permitió el aumento de ratio el año pasado, el anterior y el siguiente. Los incrementos no los he inventado yo. En ningún caso hemos hecho nada ilegal", precisó.

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Los padres se oponen

Aunque Peral insiste en que esta posibilidad se brinda para que prevalezca el derecho de los padres a elegir, las asociaciones no están de acuerdo. Mercedes Díaz, presidenta de la Federación de Asociaciones de Padres Giner de los Ríos -mayoritaria en Madrid-, aseguró que "no se garantiza la elección de los padres. Es una excusa que utilizan porque no hay suficientes centros". En su opinión, masificar las aulas supone "bajar la calidad de la enseñanza" y "atenta contra el pacto educativo firmado en marzo entre todas las entidades educativas de la región". En él se acordó que se reducirían las ratios para mejorar la calidad de la educación.

El sindicato de enseñanza ANPE también se opone a la iniciativa. Su portavoz, Carmen Guaita, aseguró que la Comunidad dispone de profesorado suficiente para ampliar unidades, o crear más aulas en los colegios con mayor demanda. "Esto es un grave error. La enseñanza madrileña soporta un volumen de alumnos con dificultades y necesidades especiales muy alto. Masificar las aulas no ayudará a mejorarlo", aseguró Guaita. "Se proponen concedérselo a los centros con mayor demanda. ¿Acaso no debería premiárseles en lugar de castigarles?", se preguntó la portavoz de ANPE.

Peral también matizó este asunto. Según aclaró, el problema no se puede resolver con más profesores o más aulas porque no hay espacio físico suficiente para ello.

"Se trata de colegios con edificios antiguos, donde el espacio es muy limitado como para incorporar más módulos. No caben más unidades", explicó el consejero. También descartó concertar más colegios -los centros que más exceso de solicitudes registran- porque la cifra actual ya está al límite.

A Peral le "encantaría que esta presión de exceso de solicitudes también se produjese sobre los colegios públicos de forma generalizada". De todas formas, reconoció que en algunos centros públicos también existen más peticiones que plazas por su calidad docente. Como ejemplo puso el Alberto Alcocer, donde el año pasado solicitaron 104 personas cuando sólo había 66 plazas; o el colegio público Las Rozas, que lo pidieron 75 personas y sólo disponía de 44 plazas.

El diputado socialista Adolfo Navarro considera que Educación no está haciendo su papel. "La obligación de la Consejería es construir nuevos centros e institutos para atender la demanda. Como no invierte en nueva construcción de centros y ya no quiere recurrir a los barracones, como otros años, ha decidido masificar los centros", aseguró Navarro. El parlamentario socialista criticó que con lo excepcional se está haciendo una norma. "El problema se soluciona invirtiendo más dinero en educación, ya que ésta es la Comunidad que menos PIB destina a este fin", concluyó.

Peral insistió en que la medida será previa solicitud del centro y para favorecer el derecho de los padres a escoger el colegio de sus hijos. "Si aumenta en dos o tres personas por aula, no habrá tanto perjuicio. Todos los gobiernos aumentan la ratio, y me parece muy bien, porque prevalecen los derechos de los padres", dijo.

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