La Guardia Civil controla las protestas de unos viajeros de Air Madrid
Un vuelo de la aerolínea llega a Barajas desde Argentina con 26 horas de retraso
Nueva jornada de retrasos para los viajeros de Air Madrid. Un vuelo de esta compañía procedente de Buenos Aires (Argentina) llegó ayer al aeropuerto de Barajas con casi 26 horas de retraso. Además, agentes de la Guardia Civil y vigilantes de seguridad del aeropuerto tuvieron que intervenir en la madrugada del viernes pasado para calmar los ánimos de otro grupo de pasajeros de un vuelo con destino a Lima (Perú) que llevaba cinco horas de demora.
Varios pasajeros del vuelo que cubría el trayecto Buenos Aires-Madrid explicaron ayer que el vuelo tenía que haber aterrizado en el aeropuerto de Barajas el jueves pasado a las 10.00. Sin embargo, lo hizo un día y dos horas después. Una vez en tierra, agotados, los afectados por la demora se dirigieron a las oficinas que Air Madrid tiene en Barajas para presentar una reclamación. "El viaje ha sido un infierno. Hemos perdido conexiones con otros vuelos y hemos estado 24 horas totalmente desinformados", denunciaron los reclamantes.
Fuentes de Air Madrid explicaron que el retraso del vuelo de Buenos Aires se había debido a un problema con la rotación de la tripulación, que necesitaba descansar. "Estamos volviendo a la normalidad, en todo el día no hemos tenido ningún problema de más demoras", señalaron en la compañía. Pero en la madrugada del jueves al viernes, agentes de la Guardia Civil y miembros del servicio de seguridad del aeropuerto tuvieron que acudir a calmar los ánimos de los pasajeros de una ruta hacia Lima (Perú), que tenía previsto salir a las 23.50 del jueves y que despegó, finalmente, más de cuatro horas después del horario previsto: a las 4.35 del viernes.
Éstos no fueron los únicos vuelos de Air Madrid que ayer sufrieron retrasos. Las pantallas de información de Barajas informaban de que un vuelo procedente de Guatemala, que tenía que haber aterrizado a las 13.15, lo iba a hacer a las 20.30.
Air Madrid comenzó a volar en mayo de 2004. La línea cubre varias ciudades españolas y Argentina, Costa Rica, Panamá, Colombia, Ecuador, Perú, Chile, México y Brasil. Tiene nueve aviones para cubrir esos destinos. Una reciente encuesta de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) colocaba en los últimos puestos en valoración a esta empresa.
La compañía acumula retrasos desde el pasado mes de septiembre. Los inspectores de Aviación Civil consideran que hay que limitar los vuelos de la compañía o, incluso, retirarla la licencia, pero el Ministerio de Fomento aún no ha tomado una decisión. La Ley de Seguridad Aérea señala que el incumplimiento de las aerolíneas de sus obligaciones con los usuarios está tipificado como infracción leve, salvo que no se les asegure sus derechos en caso de denegación de embarque, que sería grave. Air Madrid podría enfrentarse a sanciones de entre 4.500 y 450.000 euros
El pasado día 5 de diciembre, la compañía obligó a ocho pasajeros ecuatorianos a abandonar la zona de embarque y los declaró viajeros no gratos. Los afectados, que llevaban más de un día esperando a que saliese su vuelo, niegan que hayan participado en alguna agresión.
Y el fin de semana pasado, tanto el sábado como el domingo, pasajeros de Air Madrid sufrieron interminables horas de espera. El sábado pasado, más de un millar de personas se vieron perjudicadas por retrasos de hasta 72 horas en al menos cinco vuelos de la compañía. Dos centenares de pasajeros defraudados reclamaron a gritos en el aeropuerto. El domingo pasado se volvió a repetir la escena: 100 usuarios, procedentes de dos vuelos con destino a Buenos Aires, lanzaron su frustración contra la oficina de la compañía.
