Madrid se pone en hora con China

Para conocer cualquier lugar del mundo, nada como verlo a través de los ojos de sus habitantes. Aunque en el caso de un país con casi 10 millones de kilómetros cuadrados y más de 1.300 millones de ciudadanos, como China, la empresa se complica. Pero desde el pasado día 18 y hasta el 21 de marzo el centro cultural Matadero Madrid ofrece un acercamiento privilegiado para todo aquel que sienta la más mínima curiosidad por el país asiático que empieza a marcar el paso de la política y la economía mundiales. Es la hora de China.

Así, y como antesala de la futura Exposición Universal de Shanghai, que se celebrará entre el 1 de mayo y el 31 de octubre, el Ayuntamiento -Madrid tendrá su propio pabellón junto a las otras 12 ciudades seleccionadas en todo el mundo-, de la mano de la Casa de Asia y la Sociedad Estatal para las Exposiciones Internacionales (SEEI), ha reunido las obras de 17 artistas chinos de prestigio internacional bajo el título Beijing Time. La hora de China.

'Beijing Time' reúne escultura, cine, videoarte, fotografía, dibujo digital...

"Hace alusión a que la hora de Pekín es la hora de China, aunque las distancias que separen la capital de cualquier otra zona del país sean de miles de kilómetros; pero también hace referencia a la irrupción de China como gran potencia mundial", explica Menene Gras, directora de Cultura y Exposiciones de Casa Asia y comisaria de la muestra.

La exposición, ubicada en la nave 16 de Matadero, reúne obras de gran formato: instalaciones, esculturas, videoarte, fotografía, cine, dibujo digital... Una gran variedad de impresiones de la China de hoy que tiran por tierra muchos de los mitos y los prejuicios que todavía existen hoy en relación al país asiático. Un mosaico de visiones que reflejan la necesidad de una sociedad que crece a un ritmo vertiginoso de buscar y reivindicar su propia identidad, de dejar constancia de las miserias y las grandezas de un cambio y una transformación brutal, de preguntarse por su sentido y por su destino.

Destaca una impresionante y particular reproducción digital de El jardín de las delicias de El Bosco (el pintor holandés Hieronymus Bosch). "Está todo hecho con ordenador", explicaba el artista Miao Xiaochun frente a su enorme tríptico. "Cuando descubrí esa obra de Bosch me quedé un año observándola, cada mínimo detalle; después quise hacer mi lectura personal y éste es el resultado: Adán es un robot, a Eva le falta un brazo, los cientos de personajes que forman parte de la obra original los he convertido en una imagen de mí mismo repetida muchas veces de muchas maneras, el infierno está gobernado por una gran computadora que es el símbolo de que con sólo apretar un botón todo puede acabar para empezar de nuevo; esta obra es circular", comentaba.

Junto a él, otros nueve artistas chinos, que estuvieron presentes en la presentación de la muestra, pasaron una semana en Madrid montando esta gigantesca exposición y haciendo contactos para un futuro. "Las relaciones son siempre de ida y vuelta, hay un dar y un recibir", apuntaba Javier Conde de Saro, presidente de la SEEI, que apostillaba: "Hay vida después de Shanghai".

Beijing Time. La hora de China. Exposición previa a la Expo 2010 de Shanghai. De martes a sábado, de 16.00 a 22.00. Domingos de 11.00 a 22.00. Miércoles 6 de enero, cerrado. Entrada gratuita. Hasta el 21 de marzo en el Matadero.