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"Será una auténtica revolución"

El ministro de Educación, Ángel Gabilondo, respalda la promesa de Tomás Gómez de ofrecer escuelas infantiles "universales y gratuitas" hasta los tres años

El razonamiento era palmario, pero no por ello el auditorio aplaudió menos al ministro de Educación, Ángel Gabilondo, cuando lo expuso: "¿cómo se defiende la enseñanza pública? Llevando allí a nuestros hijos", aseguró. Ni siquiera le hizo falta hacer pausa escénica: los asistentes a las jornadas sobre educación del PSM le interrumpieron con más entusiasmo aún que cuando contó que, en un bar, había oído a un señor decir que pensaba cambiar al niño de colegio porque "le venía con ideas". Gabilondo dio un consejo a Tomás Gómez, que esperaba en primera fila su turno de palabra -el ministro se autodenominó su "telonero"-: "no hay que poner ni una sola línea de algo que no vayamos a hacer. Ya sé que va a quedar más corto". Más risas del auditorio.

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A apenas dos meses de las elecciones, el candidato socialista a la presidencia regional aprovechó la clausura de la conferencia sobre educación para recordar o presentar sus propuestas. La de más enjundia, la que puede beneficiar a más ciudadanos y que él calificó de "auténtica revolución en Madrid", no es ninguna novedad. Gómez aseguró que, si gobierna, la educación de los niños entre cero y tres años será "universal y gratuita", es decir, que ningún niño se quedará sin plaza en una escuela infantil pública. El ahora candidato ya se presentó en el comité regional de diciembre de 2009 con esa misma propuesta, que a su vez amplifica una de Zapatero de 2007 (300.000 plazas nuevas en toda España, un 128% más de la oferta existente entonces).

Quizá intuyendo que lo primero que piensa uno al escuchar esa promesa es en su coste, el propio Gómez afirmó: "claro que hemos medido lo que significa económicamente". Sindicatos y profesionales del sector calculan en unas 30.000 las familias que cada año se quedan sin plaza en las escuelas infantiles. "En esta comunidad no se va a gastar más dinero, se va a gastar mejor", aseguró Gómez, y ahí aparcó el tema para seguir enunciando otras propuestas educativas. No habló de cantidad, aunque otras veces ha dicho que con los 700 millones de euros que ha gastado Esperanza Aguirre en "publicidad y propaganda" se podrían hacer 400 escuelas infantiles.

Una propuesta novedosa es la creación de una "beca interestudiantil" que un alumno excelente cedería a otro. El documento resumen de las jornadas, que servirá de base para el programa electoral, explica que los estudiantes que "no necesitando beca, consigan una matrícula de honor en una asignatura conseguirán con su esfuerzo que esa misma asignatura sea gratuita en el siguiente curso para alguien con necesidades económicas". Gómez aludió ayer también a la mejora de la formación profesional, el impulso de un "bilingüismo real" -en contraposición con el "ficticio" de la Comunidad de Madrid-, la creación de una ley de educación para Madrid...

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Gómez se refirió también a la polémica de la capilla de la Complutense. "Lo que tiene que hacer un Gobierno autonómico no es menoscabar la credibilidad de una universidad pública, sino apoyar a sus profesores e investigadores". El candidato socialista animó al voto "del cambio" al afirmar que el 22 de mayo pueden llegar "estos que defienden los hospitales exclusivos, los colegios privados y el 22 de mayo querrán aún más, querrán coger lo que es de todos".

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