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El calor dispara el 'ozono malo'

El umbral de alerta se ha superado 14 veces en ocho municipios - El gas puede causar irritación ocular, tos, dolor de cabeza y disminuye la función pulmonar

Es probablemente el contaminante menos conocido. Se suele hablar más del dióxido de nitrógeno (NO2 ), de las partículas que traen los aires saharianos, del dióxido de carbono (CO2 ). Pero el ozono, un gas inodoro e incoloro, también genera problemas de salud. Sobre todo ahora, en los meses de verano. El ozono troposférico -conocido como ozono malo, frente al bueno, el estratosférico, que hace de filtro de la radiación ultravioleta- se comporta, además, al revés que los otros contaminantes. No da problemas en lugares como el eje de la Castellana, o en el corredor del Henares y el Cinturón Sur, sino en zonas tan poco sospechosas de respirar aire sucio como pueden ser la sierra o la Casa de Campo.

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Ozono troposférico

En lo que llevamos de verano, ocho municipios de la región han superado el umbral de información. Así se conoce al nivel a partir del cual las Administraciones están obligadas a informar a los ciudadanos.

En 14 ocasiones las estaciones de medición han marcado más de 180 microgramos por metro cúbico. En esos casos, la recomendación que se realiza a los grupos de riesgo (niños, ancianos, personas con problemas respiratorios) es "no permanecer al aire libre ni hacer esfuerzos prolongados al sol y evitar el contacto con alérgenos (polvo, polen, animales)". El motivo: el ozono, en altas concentraciones, produce irritación de los ojos, dolor de cabeza, tos y disminución de la función pulmonar.

El verano pasado, ninguna de las 23 estaciones de medición de la Comunidad de Madrid superó el umbral de información. Este verano ya van 12: en Algete, El Atazar, Majadahonda, Guadalix de la Sierra... La última vez, el 26 de julio, cuando en Orusco de Tajuña se superaron los 180 durante dos horas seguidas.

La explicación tiene menos que ver con las emisiones del tráfico y la industria que con las condiciones meteorológicas. Es básicamente la radiación solar la que provoca la formación de ozono, según explica Ángel Cámara, catedrático de Ingeniería Química y Combustibles de la Universidad Politécnica de Madrid.A mejor tiempo, más caluroso, más soleado y menos ventoso, más posibilidades hay de que los óxidos de nitrógeno (procedentes de la combustión de los vehículos) y los compuestos orgánicos volátiles (como el benceno) reaccionen con la radiación solar. Estos gases son los "precursores del ozono", explica Cámara. Aunque la radiación solar es uno de los elementos clave para que se dé la acumulación del ozono troposférico, curiosamente, es al final de la tarde, cuando los rayos del Sol tienen menos intensidad, el momento en que se traspasan los límites. Esto se debe a que la producción de ozono es acumulativa, es decir, que va aumentando poco a poco a lo largo del día, hasta que saltan las alarmas entre las seis de la tarde y las diez de la noche. Y sucede fuera del centro metropolitano porque allí la radiación solar no es capaz de atravesar la capa de contaminación con tanta facilidad como en cielos más limpios.

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La Comunidad de Madrid prevé que a lo largo del verano se pueda superar el umbral en más ocasiones. Las olas de calor de este mes de julio han sido decisivas en la formación de ozono, asegura Ricardo Vargas, subdirector de Calidad Atmosférica de la Consejería de Medio Ambiente. Precisamente atribuye al calor la diferencia entre este verano y el anterior. "La temperatura media en Algete fue de 26,7 grados, mientras que este año es de 27,7", añade. Y ofrece otro dato que lo corrobora: en 2003, durante la ola de calor que se cobró miles de muertos en toda Europa, el umbral de información se superó más de 500 veces.

La legislación establece un segundo umbral, el de alerta, que se sitúa en 240 microgramos por metro cúbico de media horaria. "Nunca se ha superado en la Comunidad de Madrid", recuerda Vargas. En 2003, sin embargo, se registraron 243 microgramos, pero entonces el umbral de alerta que fijaba la legislación era muy superior: 360. Los expertos suelen situar en 200 el nivel en el que se producen molestias. "El ozono es una sustancia irritante, oxidante, que provoca dificultad respiratoria, más reacciones asmáticas, rinitis, conjuntivitis...", enumera Pilar de Lucas, neumóloga de la Sociedad Madrileña de Neumología (Neumomadrid). Varios estudios han demostrado, añade, que las altas concentraciones del gas coinciden con el aumento de las visitas a los servicios de urgencias. Su recomendación: no practicar deporte al aire libre cuando el ozono campa a sus anchas.

Ecologistas en Acción ha alertado recientemente de los "peligros" de la actividad física en presencia de ozono. La organización asegura que las Administraciones -y las federaciones y entidades deportivas- están siendo "irresponsables" por "permitir y promover actividades deportivas en condiciones insalubres". Ni los deportistas, ni la población en general, se enteran de los avisos de las administraciones, afirman. "Unos simples paneles informativos, conectados en tiempo real con las redes oficiales, serían muy convenientes", propone Juan García Vicente, el portavoz en esta materia de los ecologistas.

Las Administraciones están obligadas a informar. Pero, ¿cómo lo hacen? La Comunidad de Madrid cuelga en su página web un aviso cada vez que se supera el umbral. Además, aseguran en la Consejería de Medio Ambiente, avisan a los medios de comunicación. "Hacemos todo lo posible", afirma Vargas, que cita como ejemplos los avisos a los ayuntamientos afectados y un servicio de SMS que alerta de las superaciones. Solo tiene 1.500 abonados. No hay campañas masivas sobre el ozono, al estilo de las que dan recomendaciones durante las olas de calor. Vargas asegura que no han considerado realizar "campañas alarmistas" y que el sentido común y las prácticas habituales ya evitan el peligro.

Contaminación en la capital, con la vista de las cuatro torres levantadas en la antigua ciudad deportiva del Real Madrid, en octubre de 2008.
Contaminación en la capital, con la vista de las cuatro torres levantadas en la antigua ciudad deportiva del Real Madrid, en octubre de 2008.ULY MARTÍN

Cómo informarse

- La página web de la Comunidad (Madrid.org) informa casi al minuto de las concentraciones de ozono, pero no es fácil llegar hasta el apartado de Calidad del Aire. Requiere cinco clics, y eso si se sabe cómo llegar. Las alertas no están en la portada. En Google, es el primer resultado a la búsqueda de "calidad, aire, comunidad, Madrid".

- El Consistorio madrileño informa en Munimadrid.es, pero tampoco se accede desde portada. Se necesitan dos clics.

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