"Los ciudadanos no notarán diferencia con uno público"
Los primeros pacientes del hospital de Torrejón de Ardoz llegarán el 22 de septiembre. Encontrarán un centro ya equipado, amplio, luminoso y con sus 710 trabajadores en sus puestos. En apenas tres semanas, todos los servicios del hospital estarán abiertos: el 28 de septiembre, las consultas y las pruebas exploratorias; el 5 de octubre, el hospital de día, los quirófanos de cirugía sin ingreso, la diálisis y la UCI; y el 13 de octubre empezará la cirugía con ingreso, la hospitalización, la maternidad y las urgencias. El consejero de Sanidad, Javier Fernández-Lasquetty, aseguró ayer que el centro está equipado para atender el 95% de las necesidades de la población de su área de influencia, unos 136.000 habitantes de Torrejón y de otros cuatro municipios.
"Me consta que el proceso de selección de personal ha sido muy exigente", señaló el consejero ayer durante la presentación a la prensa del nuevo hospital. Los trabajadores del centro no han sido seleccionados por la Consejería de Sanidad, sino por la unión de empresas que ganó el concurso para construir y gestionar el hospital. Es decir, que los 144 médicos y las 295 enfermeras, entre otros, no son empleados públicos. Es la principal diferencia entre este centro y los siete inaugurados a la vez en 2008.
Mientras aquellos conservaban la gestión pública de los servicios estrictamente sanitarios, el de Torrejón es de gestión enteramente privada. El único precedente en la región es el hospital de Valdemoro, inaugurado en 2007 siguiendo la misma fórmula. La Comunidad prevé destinar 26,84 millones de euros este año a pagar la asistencia que presten las empresas propietarias del hospital, lideradas por Ribera Salud, a los ciudadanos que quieran usar el centro. Según explicó ayer Fernández-Lasquetty, 4.000 personas ya tienen cita. El consejero aseguró que "los ciudadanos no van a notar ninguna diferencia" con un hospital de gestión pública. "El funcionamiento es exactamente igual", añadió.
El alcalde de Torrejón, Pedro Rollán, afirmó estar "convencido de que estamos en las mejores manos". La apertura del hospital "representa un hito histórico" para el municipio, el único mayor de 100.000 habitantes que no contaba con uno, añadió.
