Siete 'cócteles molotov' en una parroquia
La Guardia Civil investiga el hallazgo de los artefactos en Majadahonda
Durante la misa matutina del domingo, un leve olor a gasolina inquietó al cura de la parroquia de Santa Genoveva de Torres de Majadahonda. El olor venía del conducto de aire acondicionado del barracón provisional donde está el templo. Tras subir a comprobarlo junto a un feligrés, ambos detectaron unas botellas con gasolina. Los técnicos en explosivos de la Guardia Civil, que llegaron tras el aviso del párroco, ordenaron desalojar la iglesia. Ahora investigan siete artefactos molotov que no explotaron ni causaron ningún daño en las instalaciones.
El cura, David Benítez, dio las dos primeras misas del día sin aire acondicionado, apagado tras detectar el olor, y con las siete botellas con gasolina sobre las cabezas de los alrededor de 500 feligreses que acudieron. Tras la llegada de la Guardia Civil, sacaron las sillas al aparcamiento que hay junto al barracón y el párroco ofició la misa de la una de la tarde al aire libre. Ayer calificaba lo ocurrido como "un intento de atentado", algo que "no puede evitar que hagamos nuestro servicio a los fieles".
La parroquia está situada en una zona tranquila de nueva expansión, alejada del centro de Majadahonda. Se inauguró hace poco más de un año, y tiene como sede unos barracones a la espera de que se construya el templo en un terreno que cedió el Ayuntamiento a la Iglesia católica.