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53.900 parados más

Madrid es la región donde más ha crecido el desempleo

Jesús Sérvulo González

Quien más y quien menos ha tenido el mal sueño de perder el empleo. O la pesadilla se ha hecho realidad y se ha quedado sin él en los últimos meses. Y es que el paro no deja de crecer. Ya hay 552.400 personas sin trabajo en la Comunidad de Madrid, según la encuesta de población activa (EPA) del primer trimestre del año publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Una cifra escalofriante que eleva al 16,17% la tasa de desempleo en la región. La situación empeora con rapidez: en tan sólo año y medio este porcentaje se ha duplicado. Los responsables regionales no están para sacar pecho, aunque la tasa de paro sea cuatro puntos inferior a la media nacional.

De nada le sirve a Madrid tener un mercado laboral más estable o contar con las sedes de grandes multinacionales y una gran población de funcionarios. La última oleada de la EPA ha situado a la Comunidad de Madrid como la región donde más crece el desempleo en términos absolutos: 53.900 personas se han incorporado a las listas del Inem entre enero y abril. Por sectores, la construcción vuelve a dar un disgusto. Una vez finalizado el incentivo del Plan E, que ha amortiguado durante meses el desplome del trabajo en el tajo, el sector se ha resentido. El mal tiempo de este invierno tampoco ha ayudado. Un informe del Banco Central Europeo ya advirtió que las abundantes lluvias no ayudarían a la recuperación del ladrillo. El número de personas que trabajan en la construcción se ha reducido un 17,6% en el último trimestre. Más de 40.000 obreros han dejado de trabajar en el andamio. Esto ha provocado que el desempleo haya sido más virulento entre los hombres que entre las mujeres durante este periodo. Y Madrid no es ninguna potencia en el sector agrario. Una actividad que se extingue en vista de los últimos datos: las personas empleadas en este sector se han reducido a más de la mitad en el último trimestre.

El mercado no puede absorber a los nuevos demandantes

Otro pésimo dato: el 6,6% de los hogares madrileños tiene a todos sus miembros en el paro. Además, la región está dejando de ser el lugar donde los extranjeros buscaban trabajo. El paro de los inmigrantes no europeos asciende al 27%.La industria también anda tocada. El empleo en este sector se ha derrumbado un 9,6%. Pero uno de los fenómenos que más han influido en el mal dato del paro en la Comunidad de Madrid es el fuerte aumento de la población activa. Durante el primer trimestre del año ha crecido en 19.200 personas. "Muchos que no estaban trabajando (estudiantes u otros trabajadores) se han apuntado al paro porque ven que con la situación actual necesitan un empleo para elevar los ingresos del hogar", explica Maricruz Elvira, responsable de Empleo de CC OO. La situación se agrava porque el mercado laboral no puede absorber a estos nuevos demandantes de empleo. No sólo no se crea empleo, sino que se destruye. "Madrid está sufriendo los mismos síntomas que el resto de regiones, pero de una forma un poco más lenta", precisa Nuria Albert, de UGT. Desde ambos sindicatos se ha denunciado la falta de políticas para fomentar el empleo en la región. Y han culpado al Ejecutivo regional. La portavoz socialista en la Asamblea, Maru Menéndez, acusó a Aguirre de adoptar medidas "intencionadas" para que crezca el paro en España.

Los malos datos sobre el empleo de Madrid publicados ayer por el INE provocaron la salida en tromba de varios consejeros de la Comunidad de Madrid para justificarlos. El consejero de Economía, Antonio Beteta; la de Empleo, Paloma Adrados; y el de Presidencia, Justicia e Interior, Francisco Granados, echaron la culpa de la situación al Gobierno estatal. La única que reconoció que "los datos del primer trimestre son preocupantes" fue Adrados.

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Sobre la firma

Jesús Sérvulo González
Redactor jefe de Economía y Negocios en EL PAÍS. Estudió Económicas y trabajó cinco años como auditor. Ha cubierto la crisis financiera, contado las consecuencias del pinchazo de la burbuja inmobiliaria, el rescate a España y las reformas de las políticas públicas de la última década. Ha cursado el programa de desarrollo directivo (PDD) del IESE.

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