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TRIBUNALES

Por primera vez una sentencia judicial española cita el 'copyleft'

La asociación cultural La Dinamo no tendrá que pagar derechos de autor a la SGAE por la música emitida, ya que, según el juez, está libre del cobro

La asociación cultural La Dinamo ganó un juicio ante la SGAE, que le exigía pagar derechos de autor por la música que se programaba en esta asociación. El juez concluyó que dicha música era copyleft, libre de pago de derechos de autor, sentando un precedente al incluir por primera vez en una sentencia española el término copyleft. La SGAE recurrirá.

Otro frente para la entidad se sitúa en Bruselas. La Comisión Europea ha abierto un expediente para investigar las prácticas monopolísticas de la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores, cuyo miembro en España es la SGAE. Según Bruselas, algunos aspectos de los contratos de cesión de derechos de música para Internet, cable o satélite infringen la prohibición de prácticas restrictivas, especialmente la obligación para los autores de transferir sus derechos sólo a la sociedad de su país.

Según Pedro Farré, director de Relaciones Institucionales de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), esta afirmación es falsa: "Nosotros tenemos a autores cubanos, argentinos, brasileños. No existe tal hermetismo de fronteras ni situación de abuso". La Comisión ha recomendado la creación de una licencia única europea para la descarga de música en Internet, algo que no satisface a Farré: "Mete en el mismo saco todo tipo de productos, incluida la cultura. Mermará la diversidad cultural y sólo beneficiará a las culturas preponderantes, especialmente la anglosajona".

Denuncia a Frikipedia

Por otro lado, Farré ha asegurado a Ciberp@ís que retirará la demanda contra el autor de la Frikipedia, "si retira esos contenidos de Internet, se retracta y pide disculpas". La semana pasada, la SGAE demandó a esta web satírica por aludir al nombre de la entidad en términos que califica de difamatorios.

La Frikipedia nació como una parodia de la enciclopedia digital Wikipedia. Su definición de la SGAE era, según Farré, "una clamorosa difamación". Al recibir la demanda, el autor de la web la cerró y pidió ayuda económica a la comunidad internauta, para sufragarse un abogado. Más de 200 webs secundaron una campaña de apoyo.

Farré afirma que esta campaña no ha influido en la decisión de retirar la demanda, si se cumplen sus condiciones, y califica a sus instigadores de "grupo no amplio de internautas, sin un mínimo rigor intelectual, cuatro personas que odian nuestra organización, porque es eficaz defendiendo los derechos de sus socios".

El clima entre este sector internauta y la SGAE está cada vez más enrarecido, prueba de ello son los insultos o las pintadas aparecidas en la fachada de la sede de la entidad. "La policía está pendiente de este movimiento porque no sabemos cuántas personas hay detrás".

También, un programador ha descubierto que el sistema de envío de comentarios de la web de la SGAE tiene un filtro que bloquea palabras malsonantes, entre ellas el nombre del sistema operativo libre Linux. Farré lo califica de "anécdota ridícula. Hace cinco años, cuando hicimos este filtro, Linux se asociaba a movimientos alternativos y a insultos. Olvidamos retirarla, pero se retirará".

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