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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Consigna, no molestar

Todos sabemos que estamos condenados a entendernos con Marruecos. También parece indudable que la consigna del Gobierno de Zapatero es la de "no molestar" a nuestro vecino del Sur.

Apenas nos ha dado tiempo a reponernos del último rifirrafe en la frontera -pequeña crisis que, aunque "inexistente" según Moratinos, motivó la intervención telefónica de nuestro Rey ante el monarca marroquí-, cuando ya tenemos otra espinosa cuestión ante nosotros.

El apaleamiento en El Aaiún por parte de policías del país vecino, a 14 españoles que se manifestaban en apoyo al pueblo saharaui, pone de manifiesto los modos y maneras con que el Gobierno de Marruecos gestiona este tipo de asuntos. Hasta ahí el antidemocrático y brutal comportamiento de los "de fuera". Pero lo más sorprendente y doloroso, a mi juicio, es la reacción de los "de dentro".

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La señora Valenciano, secretaria de Política Internacional del PSOE, lejos de manifestar su apoyo a nuestros compatriotas, ha rehusado condenar las agresiones porque, según ella, no están confirmadas. A continuación manifiesta que los españoles deben "cumplir la ley cuando no están en nuestro país". Señora Valenciano, ninguna ley puede amparar el maltrato a unos manifestantes, aunque la manifestación no tenga autorización, y creo que debería producirse una protesta por vía diplomática más allá de sus consignas de no molestar a Marruecos. Todavía tengo la esperanza de que se produzca. Ya está bien.- Maribel Egido Carrasco. Coca, Segovia.

Injusta ley electoral ¿Cómo puede ser que en un sistema que se define como democrático la opinión de 306.000 personas sea más determinante que la de 970.000? ¿Qué sistema electoral permite que los votos de 306.128 votantes (seis diputados del PNV) sea decisiva en la elaboración de los próximos Presupuestos Generales mientras se desprecia por insignificante la voluntad de 969.946 votantes (dos diputados de IU)? ¿Si somos más los que apoyamos unas políticas de izquierdas, por qué no se refleja esto en la orientación que el Gobierno dé a los Presupuestos? ¿Por qué un voto para el PNV vale tres veces más que el mío? ¿Por qué un votante del PNV tiene ahora capacidad de influir en los próximos Presupuestos Generales y yo no? ¿Es eso justicia.

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