Crédito personal
El otro día fui al banco a renovar las condiciones de mi póliza de crédito personal contratada hace un par de años a Euríbor más 1,5 puntos. Ya iba preparado para asumir un mayor diferencial debido a las circunstancias actuales, pero cuál fue mi sorpresa cuando el director de la oficina me transmite que las nuevas condiciones son un interés del 13% los tres primeros meses y Euríbor más 7,75 puntos el resto de meses con vencimiento anual. Con el precio del dinero al 2% en la eurozona, los diferenciales que obtiene el banco por su negocio prestamista no son solamente desorbitados sino que me atrevo a afirmar que hasta éticamente reprobables, aunque entiendo que esto pueda ser discutido. Es curioso que el Gobierno esté inyectando liquidez a espuertas a los bancos para facilitar el crédito a las empresas y particulares, cuando lo único que están haciendo éstos es sanear sus cuentas con dinero público. Me pregunto por qué estas medidas no se han trasladado a otros sectores estratégicos en nuestra economía. Pero lo que más me impactó fue llegar a casa y ver al señor presidente en un programa televisivo donde nos animaba a todos los españoles a consumir y a las grandes empresas y ejecutivos a moderar sus rentabilidades y sueldos respectivamente. Con todo el respeto, señor Zapatero, los bancos nos han cortado el crédito a los ciudadanos y empresas y se aprovechan de la situación para incrementar sus márgenes operativos de manera abusiva, pero le aseguro que si no hace algo por imponerse también van a acabar con su crédito personal.