Educación en casa
En Estados Unidos, la home school llega ya a cerca del millón de niños, y en España han optado por ella un millar de familias.
Es una alternativa a la enseñanza tradicional: los estudiantes no van a la escuela y estudian en casa siguiendo un plan totalmente personalizado bajo la dirección de los padres.
Hay estudios que demuestran que los niños así educados presentan mayor madurez y más estabilidad emocional; también consiguen mejores resultados académicos gracias a la personalización educativa.
Contrasta esta tendencia con el sistema uniformizante de la escuela estandarizada de nuestro país, en la que no se exigen metas adaptadas a la capacidad potencial de cada alumno, y en la que resulta muy difícil la personalización educativa. Y es bien sabido que la personalización influye en el éxito académico.
Dado el fracaso escolar que arrastramos desde hace tiempo, no puede sorprender que, pese a no estar reconocida ni regulada en nuestro país, con las posibilidades que ofrecen Internet y las nuevas tecnologías, también aquí haya cada vez más familias partidarias de la educación en casa.